El Defensor del Pueblo condenó el secuestro de la menor y reiteró su llamado a los grupos armados ilegales para que extiendan el cese de hostilidades y respeten el Derecho Internacional Humanitario.
El Defensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora Gómez, celebró el regreso a la libertad de la niña Alejandra Cantoñí en el departamento del Cauca, a la vez que condenó su secuestro, ocurrido cuando se dirigía hacia su colegio en el municipio de Guachené.
La hija del Comandante de la Policía en Padilla (Cauca) y estudiante de primero de bachillerato en la institución Educativa Jorge Eliécer Gaitán, fue abandonada por los responsables de su rapto en jurisdicción de Toribío, desde donde fue trasladada a su hogar con el acompañamiento de las autoridades y de entidades como la Defensoría del Pueblo.
Otálora Gómez insistió en que “los niños son intocables” y exaltó la participación de la guardia indígena para facilitar la liberación de la menor, trece horas después de haber sido abordada por desconocidos en una zona donde confluyen las FARC, grupos narcotraficantes y bandas de la delincuencia común.
El Defensor del Pueblo lamentó el recrudecimiento de la violencia en algunas regiones del país, como en Antioquia, donde un bus que cubría la ruta entre Ituango y Medellín fue incinerado por presuntos integrantes del frente 36 de las FARC.
Jorge Armando Otálora Gómez reiteró su llamado a los grupos armados ilegales para que respeten el Derecho Internacional Humanitario y extiendan le tregua, que en el caso de la guerrilla terminó el pasado 28 de mayo.
Vale la pena indicar que durante los ocho días de cese al fuego, la Defensoría observó una disminución importante en los hechos de violencia, aunque tuvo conocimiento sobre el hallazgo de artefactos explosivos en los departamentos de Cauca, Caquetá, Tolima, Guaviare, Casanare y Meta, sin que se produjeran consecuencias que lamentar para la población civil.