Así lo decidió el Consejo de Estado, quien estableció que el hogar no contaba con la seguridad necesaria para el cuidado de los niños.

El fallo ordenó que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, deberá pagar una suma cercana a los 85 millones de pesos a los familiares del menor fallecido. Según el reporte, el menor estaba jugando con sus compañeros, cuando resbaló y cayó por la pendiente que lo condujo a la Quebrada La Iguana, donde lastimosamente se ahogó.

Los dineros que deben ser cancelados a los acudientes, corresponden a reparos materiales y morales por lo sucedido. Así mismo dentro de la sentencia se manifiesta que la madre comunitaria no estuvo pendiente de las actividades que realizaban los menores.