El jefe del Parlamento de Venezuela, el opositor Julio Borges, pidió abrir un diálogo sobre la crisis del país con el alto mando de la Fuerza Armada, que ha jurado "lealtad incondicional" al presidente Nicolás Maduro.
"Hago un llamado al ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, a que abra las puertas a un debate sincero en la Fuerza Armada", declaró en rueda de prensa el jefe del Legislativo, único poder público controlado por la oposición.
Según dirigentes opositores, Maduro y dos de sus delegados para impulsar su iniciativa de convocar a una Asamblea Constituyente, el ministro Elías Jaua y el abogado Hermann Escarrá, sostuvieron esta semana un encuentro con Padrino López y generales para promoverla.
Ello en medio de una espiral de violencia que deja 38 muertos y cientos de heridos y detenidos en seis semanas de manifestaciones antigubernamentales que exigen elecciones generales.
"Si Jaua, Escarrá y Nicolás Maduro tienen derecho de hablarle a los generales de su visión partidista del caos que vive Venezuela, deberíamos también tener derecho", expresó Borges.
Maduro plantea un sistema en el que al menos la mitad de los 500 constituyentes serán elegidos por sectores sociales en los que el chavismo tiene fuerte influencia, lo que busca, de acuerdo con sus críticos, burlar el "voto universal".
Ya la Fuerza Armada, en un comunicado firmado por Padrino, consideró la Constituyente como "una propuesta revolucionaria, constitucional y profundamente democrática".
"Nosotros no queremos una Fuerza Armada que se pase a la oposición, queremos una Fuerza Armada que se pase a la Constitución", expresó Borges, al rechazar la "represión" contra manifestantes y los juicios a decenas de civiles en tribunales militares.
A la vez, el legislador descartó retomar un fallido diálogo entre gobierno y oposición que tuvo acompañamiento del Vaticano y una comisión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) encabezada por el exjefe de gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
"El diálogo de Zapatero (...) está muerto", indicó, subrayando que "el Vaticano dijo: elecciones en Venezuela".
Se refirió así a recientes palabras del secretario de Estado de la Santa Sede, cardenal Pietro Parolin, quien consideró que "las soluciones (a la crisis) son las elecciones".
A finales del mes pasado, el papa Francisco aseguró que el Vaticano está dispuesto a mediar "con condiciones claras".