Henrique Capriles, dos veces candidato a la presidencia de Venezuela, llamó a la oposición a unirse pensando en las clases más desfavorecidas, en una entrevista publicada el domingo por el diario español El País.
"Urge un nuevo acuerdo social con los pobres en Venezuela" afirmó Capriles, asegurando que le preocupa una oposición que no atiende a los que menos tienen.
"La oposición tiene la madurez y la conciencia de que debe haber unidad. Y la va a haber", declaró al diario del grupo Prisa, que concede un gran espacio a la situación política en Venezuela, donde el presidente Nicolás Maduro sucedió a Hugo Chávez en marzo de 2013.
Según la constitución del país latinoamericano, debería haber elecciones parlamentarias este año.
Otros dos opositores, Daniel Ceballos y Leopoldo López, encarcelados desde febrero y marzo de 2014 respectivamente, iniciaron a finales de mayo una huelga de hambre. Leopoldo López aún continúa con su protesta.
"Yo aspiro a que formen parte en la construcción de este país... Los necesitamos vivos", aseguró Capriles.
"El chavismo es una realidad política en el país, no puedes desconocerla, no debes atropellarla", aseguró a propósito del fuerte apego a Hugo Chávez de las clases más bajas de Venezuela, lamentando que ciertos sectores de oposición no lo hayan comprendido.
Sin embargo, "una cosa es el pueblo chavista y otra es Nicolás Maduro", matizó. "En mi opinión Nicolás Maduro no representa al pueblo chavista, a pesar de que este diga que es su líder. La cúpula del Gobierno... ellos no son políticos, son unos extremistas que se hicieron con el poder. Sabiendo eso, el país no va a saltar al otro extremo".
Sobre la reciente visita del expresidente socialista español Felipe González para participar en la defensa de los opositores encarcelados, que fue duramente criticada por Maduro, Capriles consideró que el español había dado "una lección de diplomacia".
"El Gobierno necesita enemigos, todos los días se inventa enemigos para tapar el desastre económico y social que vive el país", afirmó.
Capriles denunció asimismo el "silencio" de países vecinos como Colombia, Chile y Brasil frente a la situación política venezolana.