Oposición siria debate participación en "Ginebra II" | El Nuevo Siglo
Jueves, 23 de Mayo de 2013

La Coalición Nacional de la oposición siria comenzó este jueves en Estambul una reunión de tres días para debatir sobre su participación en la eventual conferencia de paz internacional "Ginebra II", mientras que el régimen del presidente Bashar al Asad mostró su determinación a imponerse a la rebelión.

La Coalición, principal grupo de la oposición siria, comenzó este jueves por evaluar la situación sobre el terreno, donde el régimen de Damasco lanzó una amplia ofensiva contra la ciudad estratégica de Quseir (oeste), según una de sus responsables.

Los opositores también empezaron a deliberar sobre la entrada de nuevos miembros en su grupo para aumentar su representatividad, indicó el portavoz de la Coalición, Jaled Saleh.

Sin embargo, será el viernes cuando se debata sobre la participación o no de la Coalición en negociaciones con el régimen de Asad para encontrar una solución política a un conflicto que en poco más de dos años ya dejó más de 94.000 muertos en Siria.

Esta conferencia internacional, llamada "Ginebra II" está impulsada por Estados Unidos y Moscú. Los socios occidentales y árabes de la oposición aumentaron la presión sobre la Coalición para que participe en ella el mes que viene.

Muchos miembros de la Coalición muestran sus reservas ante esta iniciativa.

"Acabaremos yendo a Ginebra, pero es el mismo trozo de hachís que la comunidad internacional nos da cada vez: nos hacen pensar que el final está cerca y todo continúa", comentó un opositor que pidió el anonimato.

Por su parte, Saleh se refirió a los numerosos interrogantes por resolver sobre los participantes, el orden del día y los objetivos de la conferencia.

"Antes de poder tomar una decisión política final sólida sobre una participación, todavía necesitamos numerosos detalles", señaló.

El portavoz volvió a insistir en la exigencia de la oposición siria de que "todo periodo de transición debe comenzar por la marcha de Asad y los pilares de su régimen".

Once países que apoyan a la oposición, entre los que se encuentra Estados Unidos, trataron de tranquilizar a la Coalición al afirmar el miércoles en Ammán que "Bashar al Asad, su régimen y sus allegados con sangre en las manos no podrán tener ningún papel en el futuro de Siria".

Este grupo de los "Amigos de Siria" también anunció que continuarían ayudando a los rebeldes hasta la marcha de Asad.

Este jueves, la agencia oficial siria Sana consideró que estas declaraciones cerraron el camino a "Ginebra II"

"Los participantes (de la reunión de Ammán), que se autoproclamaron portavoces del pueblo sirio, cerraron el camino a la celebración de la conferencia internacional al decir que iban a reforzar su apoyo a la oposición siria", escribió Sana.

En Estambul, esta reacción se interpretó como un signo del inminente torpedeo de Damasco a los proyectos de negociación.

"Todavía no es un rechazo oficial, pero es un signo. Sana nunca difundirá una información que no refleje la posición del gobierno", estimó Monzer Majus, embajador de la Coalición en París.

Según Sana, Asad declaró este jueves que "Siria está decidida a hacer frente al terrorismo", término utilizado por el régimen para designar a los rebeldes, al tiempo que se dijo resuelto a "encontrar paralelamente una solución política a la crisis".

La reunión de Estambul se produce en un contexto crítico sobre el terreno para la oposición, con el avance del ejército sirio, apoyado por el movimiento chiita libanés Hezbolá, en una vasta ofensiva contra Quseir, una ciudad estratégica del oeste de Siria controlada por los insurgentes.

Saleh anunció este jueves que "las brigadas del Ejército Sirio Libre lograron rechazar a las milicias del Hezbolá" y estimó que los milicianos chiitas fueron "repelidos al menos tres kilómetros".

En ocho meses de participación en la guerra de Siria, el Hezbolá perdió 104 combatientes, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), mientras que una fuente del movimiento chiita libanés dio cuenta de 75 muertos durante el mismo periodo.

En Estambul, otra prioridad de los opositores será la elección de un nuevo presidente para la Coalición tras la dimisión en marzo del presidente saliente, Ahmed Moaz al Jatib.

La Coalición también evaluará la propuesta que el líder dimisionario hizo pública este jueves de entregar un salvoconducto a Bashar al Asad y a 500 miembros del régimen para que abandonen el país, si el presidente sirio acepta dejar el poder.

También se pronunciará sobre el gabinete que le presentará a Hassan Hitto, primer ministro elegido en marzo por la oposición para administrar los territorios en manos de la rebelión.

AFP.