Oposición combatirá a Obama sobre inmigración | El Nuevo Siglo
Jueves, 13 de Noviembre de 2014

La oposición del partido Republicano en el Congreso estadounidense prometió este jueves resistirse, incluso presionando con el presupuesto, al plan de regularización de varios millones de inmigrantes que el presidente Barack Obama estaría listo a anunciar.

Obama anunció la semana pasada que hasta el fin de año firmaría una serie de decretos para resolver la situación de millones de inmigrantes en situación irregular. El diario New York Times afirmó este martes que Obama firmaría esos decretos ya en la semana próxima.

 

De acuerdo con las fuentes anónimas citadas por el diario, los padres de niños estadounidenses o cuyos hijos ya tengan un permiso de residencia podrían acceder, por un tiempo determinado, a papeles que les permitiría trabajar legalmente en el país.

 

Eso impediría la deportación inmediata de esas personas.

 

En total, unos cinco millones de clandestinos podrían ser beneficiados, de acuerdo con el diario. El número exacto dependerá de los criterios fijados por Obama, como por ejemplo el número de años de presencia en el país.

 

De acuerdo con el Migration Policy Institute, en Estados Unidos viven unos 11,7 millones de inmigrantes en situación irregular.

 

La Casa Blanca apenas informó que ningún anuncio oficial será realizado antes del retorno de Obama de un viaje por Asia, el sábado.

 

"El presidente está cerca de una decisión final", indicó el jueves el  vocero de la Casa Blanca, Josh Earnest, al responder a una pregunta sobre el artículo. "Adelantaría que el presidente recibirá alguna recomendación final relativamente pronto, aunque ciertamente no antes del final de su viaje", agregó.

 

Por su parte, la red de televisión Fox News aseguró que el plan estudiado por Obama consta de 10 puntos, y se refieren, entre otros temas, a la seguridad fronteriza, la remuneración de agentes en la frontera, y visas para extranjeros altamente calificados.

 

De inmediato, los principales líderes del opositor Partido Republicano (vencedor de las elecciones legislativas del 4 de noviembre) dejaron claro su oposición frontal a cualquier iniciativa de Obama por decreto.

 

"Lucharemos con uñas y dientes contra el presidente en caso de que insista", dijo el presidente de la Cámara de Representantes, el Republicano John Boehner. "No es así como se gobierna", añadió.

 

Aunque Boehner se negó a adelantar su estrategia, dijo que "todas las opciones están sobre la mesa".

 

Sectores conservadores presionan a Boehner para que utilice la ley de finanzas que el Congreso debe imperativamente adoptar hasta el 11 de diciembre para bloquear toda iniciativa presidencial, incluyendo un artículo que retire los fondos necesarios para adoptar un plan de regularización de inmigrantes.

 

Esta opción, sin embargo, podría conducir a un nuevo cierre del Estado federal ("shutdown"), un escenario que el país vivió en octubre del año pasado y que los Republicanos ahora afirman querer evitar a cualquier precio.

 

"No provocaremos el cierre del Estado Federal y no amenazaremos con un default de la deuda nacional", adelantó Mitch McConnell, líder de los Republicanos en el Senado.

Por su parte, el senador Republicano John McCain, partidario de una reforma del sistema migratorio, llamó a Obama a que otorgue una nueva oportunidad al Congreso para que el tema avance.

Los partidarios del oficialista Partido Demócrata, a su vez, dicen haber perdido ya la paciencia. Una carta a Obama firmada por 116 legisladores Demócratas pidió al presidente que cumpla su promesa de firmar los decretos.