Entregando un informe sobre el tema, Bruno Moro, insistió en la necesidad de prestar atención al conflicto originado por la repartición desigual de las tierras en el país.
El documento "Colombia rural, razones para la esperanza", elaborado por el Programa de Naciones Unidas para el Dearrollo (PNUD), muestra la necesidad de "tomarse en serio el conflicto originado por la tierra en Colombia", declaró Moro en el acto de presentacion del informe, al cual asistió el presidente Juan Manuel Santos.
El informe sobre desarrollo humano, el segundo sobre Colombia que realiza el PNUD en ocho años, destaca la gran desigualdad en el reparto de tierras y la necesidad de una reforma que acabe con "un orden social injusto, altamente conflictivo y una estructura rural rígida", advirtió el académico Absalón Machado, que dirigió la investigación.
"Toda la estructura de tenencia de la tierra y la estructura agraria que tiene el país impiden y dificultan el desarrollo humano", según la investigación. En Colombia 52,2% de las tierras son latifundios (con más de 500 hectáreas) y están en manos de 1,15% de los proprietarios. En contraste, 78,3% de los proprietarios agrarios tiene microfundios, de acuerdo con datos oficiales.
Estas cifras se reflejan en el coeficiente Gini de Colombia, de 0,85, uno de lo más altos de América Latina. El valor 1 indica la más alta desigualdad en este tipo de medición, según la ONU. Además, lejos de las ciudades, la desigualdad se ahonda: 64,3% de la población rural vive en la pobreza, frente a 45,5% de la población urbana. El 31,6% de los colombianos habita en el campo.
"Es un país que muchas veces desconocemos", dijo Santos en su intervención, en la cual insistió en "el compromiso ineludible con el campo colombiano" de parte de su gobierno. El mandatario destacó que ese compromiso ya comienza a concretarse, a través de una ley para la reparación a las víctimas del conflicto armado interno y la restitucion de tierras a desplazados, promulgada el pasado junio. Con esa medida, el Ejecutivo de Santos se propone devolver antes de 2014 al menos dos millones de hectáreas a campesinos despojados por la violencia de los grupos armados.
"Lo que estamos encontrando es altamente deprimente", dijo el mandatario, al revelar la cantidad de expolios de tierras descubiertos en un solo departamento, el Meta , donde se estima que fueron arrebatadas a sus propietarios 187.700 hectáreas, equivalentes al 20% de la superficie de esa provincia.
El PNUD indicó además que un bajo porcentaje de tierras está dedicado a uso agrícola (4,9 millones de hectáreas, equivalentes a 22,7% del potencial disponible de 21,5 millones de hectáreas), en parte debido al conflicto y a la falta de incentivos. En cambio, 5,8 millones de hectáreas están destinadas a la minería, por lo que la agencia de la ONU hizo un llamado a una reforma con "intervención decisiva del Estado".
AFP