La oficina en Colombia de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos condenó el asesinato de un funcionario de la Unidad de Restitución de Tierras del gobierno colombiano, tras un atentado ocurrido a principios de julio.
La ONU rechazó en un comunicado "el asesinato de Robinson Álvarez Quemba, funcionario de la Unidad de Restitución de Tierras, que falleció tras un atentado" mientras realizaba relevamientos topográficos en una zona rural del departamento de Antioquia (noroeste), el pasado 8 de julio.
Ávarez Quemba resultó baleado en el atentado y murió días después por la gravedad de sus heridas.
"Nos preocupa la continuidad de hechos que atentan contra la seguridad de funcionarios públicos, líderes, lideresas y reclamantes de tierras", dijo Juan Carlos Monge, representante encargado en Colombia de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
"Llamamos a la Fiscalía a que investigue y esclarezca el atentado en contra de la comisión de la Unidad de restitución de Tierras y el asesinato del señor Álvarez", añadió Monge, citado en el comunicado.
La oficina de la ONU en Colombia también pidió que se tomen las medidas necesarias de prevención y protección para "asegurar la viabilidad del proceso de restitución de tierras" en el país.
Colombia atraviesa desde hace más de medio siglo un conflicto armado que ha dejado cientos de miles de muertos y más de cinco millones de desplazados por la violencia.
El gobierno de Juan Manuel Santos adelanta desde noviembre de 2012 diálogos de paz con la principal guerrilla del país, las Farc, para buscar el fin del conflicto.