Un acuerdo parecía al alcance de la mano el viernes por la noche en la reunión de la OMC en Bali, tras lograrse un compromiso con India, cuya férrea posición sobre subsidios agrícolas hizo peligrar las negociaciones sobre la liberalización del comercio mundial.
"Sí", declaró el ministro indio de comercio, Anand Sharma, al ser preguntado si iba a firmar un acuerdo en esta cumbre ministerial de los 159 países miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC), considerada decisiva para salvar la Ronda de Doha, empantanada desde 2001.
"Lo apruebo. Tengo el mandato" para hacerlo, añadió el ministro, al salir de una reunión donde se le presentó un nuevo compromiso.
"Estoy más que feliz. Es un gran día. Es una decisión histórica, no solamente para India sino para todos los países en desarrollo y los países pobres. Es una victoria para la OMC, para el mundo", se congratuló Sharma.
India defendió en esta reunión de Bali que se suprimiera el tope impuesto por la OMC a las subvenciones agrícolas en el caso de que éstas contribuyan a la puesta en marcha de programas alimentarios.
India, que lidera a los 46 países en desarrollo del G33, quiere proporcionar a precios artificialmente bajos alimentos básicos a sus cerca de 800 millones de pobres.
Hasta ahora Nueva Delhi se había opuesto a varias ofertas de compromiso, lo que hacía peligrar esta reunión.
Varios responsables aseguraron que un fracaso en Bali incluso amenazaría la existencia misma de la OMC.
Así, esta cumbre ministerial, iniciada el martes y que debía terminarse este viernes a las 15H00 locales (07H00 GMT) debió ser prolongada varias horas para mantener viva la posibilidad de un compromiso.
El acuerdo presentado a India aún debe ser aprobado oficialmente por los restantes 158 países miembros de la OMC, pero ya habría sido aceptado por Estados Unidos, hasta ahora opuesto a las posiciones de Nueva Delhi, según una fuente cercana a las negociaciones.
Según una copia del borrador del acuerdo, obtenida por la AFP, no se impondrán sanciones a los países que superen el tope de subvenciones para un programa de seguridad alimentaria hasta que se halle una "solución permanente" al asunto.
Esa solución permanente debería buscarse en la 11ª reunión ministerial de la OMC, prevista teóricamente dentro de cuatro años.
En contrapartida,los países que quisieran constituir "reservas con fines de seguridad alimentaria" se comprometen a no hacer nada que "distorsione el comercio", una alusión al dumping en las exportaciones.
Paquete Bali, un "Doha light"
La reunión ministerial trata de concluir un acuerdo sobre el denominado "paquete Bali", que tiene que ser adoptado por unanimidad por los 159 Estados miembros de la OMC.
Este conjunto de medidas pretende ser la lanzadera de las negociaciones para liberalizar el comercio mundial, paralizadas prácticamente desde que se iniciaron en 2001 en Doha, capital de Catar.
El paquete, conocido como "Doha Light" porque rebaja muy sensiblemente las ambiciones iniciales de la Ronda de Doha, comprende tres pilares: agricultura, desarrollo y facilitación de intercambios, es decir, reducir la burocracia en las fronteras.
Muchos responsables han advertido que un nuevo fracaso en Bali, tras cuatro reuniones ministeriales sin resultados desde el inicio de la Ronda de Doha, supondría no solo un duro golpe para la OMC sino también para el multilateralismo en general, en estos tiempos en que los países prefieren los acuerdos bilaterales o regionales.
El calendario ha querido que los ministros de Comercio de los doce países que participan en el Acuerdo de Asociación Transpacífico, en el que participan naciones como Estados Unidos, México, Chile y Perú, viajen este viernes a Singapur, para reunirse con vistas a sellarlo antes de que termine el año./AFP