El avistamiento de payasos agresivos y siniestros, fenómeno que nació en EU y que en las últimas semanas se ha extendido al Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Suecia, Francia y México, podría llegar a Colombia, según Esteban Cruz Niño, antropólogo y profesor de Ciencias Humanas de la Universidad del Rosario, quien ha estudiado el fenómeno por más de dos años.
Al respecto, EL NUEVO SIGLO conversó con el investigador, quien acaba de publicar el libro titulado Vampiros, Caníbales y Payasos Asesinos, donde revela el fenómeno social que se ha venido presentando todos los meses de octubre desde el año 2013, cuando un desconocido empezó a aterrorizar a los habitantes del pequeño poblado de Northampton en Inglaterra, que comenzaron a colgar fotografías suyas en redes sociales, lo que creó un fenómeno masivo entre las personas.
EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué escribir sobre estas figuras tenebrosas?
ESTEBAN CRUZ: Yo ya había escrito un libro que se llama los Monstruos en Colombia sí existen que es sobre asesinos en serie. La pregunta de la que parto siempre para escribir estos libros es el por qué. De dónde viene la maldad, por qué la gente puede ser mala, por qué la gente puede hacer cosas que dañan a otros, entonces a partir de esa pregunta yo siempre quise estudiar los asesinos en serie que fue el primer libro y en este los monstruos que hemos creado como mitos, como personajes de leyenda o como personajes de cuento y la pregunta es por qué creamos estos seres malos y por qué nos gusta, por qué a la gente le atrae el terror, por qué los vampiros son tan importantes en la cultura actual, por qué la gente se disfraza de payaso agresivo a asustar a la calle y si ha habido gente que haya sido así y también por qué hay gente que mata para comerse a otros que es algo novedoso, pero ha pasado, hay unos casos que explico y los analizo desde la perspectiva científica para que el lector se dé cuenta que nosotros los humanos somos los que creamos esos monstruos como si fueran un espejo de nuestra propia maldad.
ENS: ¿Qué recursos utilizó para esa investigación y llegar a la escritura del libro?
EC: Primero yo me encerré en la biblioteca de la Universidad del Rosario y ahí analicé las bases de datos, en las revistas de criminología todos los datos que habían sobre caníbales asesinos, también soy historiador y antropólogo, entonces me dediqué a mirar libros de otros historiadores y autores que reseñan casos, por ejemplo ahí hablo de casos históricos, de barcos que se quedan flotando en el mar como un Moby-Dickn que es una novela del escritor Herman Melville donde habla de una tragedia real. Hubo un barco que lo volteó un cachalote y los sobrevivientes quedaron flotando en el mar, se quedaron sin comida y terminaron comiéndose unos a otros. También está el ejemplo de la novela que se llama la extraña narración de Arthur Gondor y ahí cuenta cómo los protagonistas se comen a otros porque se acaba la comida en el barco, eso pasó de verdad y hay un barco famoso que se llama La Fragata La Medusa, donde de 400 personas al final quedaron 15, entonces todos esos estudios, más los de asesinos de caníbales reales, de vampiros reales, hombres que de verdad se mataron a otros, se le chuparon la sangre porque tenían una fascinación por la sangre impresionante y también de payasos asesinos reales, entonces de eso se trata el libro y de entender por qué la maldad desde la psicología o la antropología.
ENS: ¿Algún caso que haya sido vivencial?
EC: Sí, yo trabajé un tiempo en un programa radial que se llama El Cartel de la Mega, en uno de esos programas en el que yo estaba sentado frente al micrófono le dije a los oyentes que llamaran los que habían comido carne humana y llamaron… Comenzó a llamar la gente a contar sus experiencias y yo quedé súper asombrado, entonces de ahí también me ansió la idea de escribir este libro, por ejemplo llamó un señor como de 50 años que contó que cuando se murió un familiar de él, se lo comieron entre todos, cosas bastante fuertes que nunca pensé escuchar.
ENS: ¿Por qué cree que pueden llegar a Colombia y darse casos acá?
EC: Los payasos asesinos los hemos sobrevalorado, yo creo que hay casos de personas, pero hay muy pocos que se hayan convertido en asesinos, realmente de esta oleada obviamente uno puede hacer un mapa de cómo se va expandiendo. Es probable que los Payasos Siniestros lleguen a Colombia y a América Latina, en la medida en que el fenómeno se ha expandido lentamente desde su aparición en 2013 y que este tipo de tendencias se presentan primero en los países desarrollados que tienen mayor conectividad. Para el 2015 ya estaban en EU y en este 2016 ya están en Australia, Nueva Zelanda, México, Argentina y Chile, entonces es un fenómeno que se ha ido expandiendo lentamente todos los octubres, inició un viernes 13 de octubre de 2013 porque es una fecha muy simbólica. Cada país es distinto, nosotros no somos Australia, entonces un payaso asesino, agresivo o que asusta allí, va más fácil en la calle, en cambio por ejemplo aquí sale un payaso a asustar a la gente en la Caracas en Bogotá a las 3:00 a. m., pues correría más riesgo la vida del payaso como el youtuber que en el Park Way en Bogotá, que tuvo que dejar de grabar una broma de payaso porque lo atacaba la gente.
ENS: ¿Cree que esa imagen maquiavélica influye en que los niños poco usen ya este disfraz?
EC: No, es más, lo que muestra esta imagen que está saliendo es la vigencia de la estética del payaso. Ya varios científicos han analizado el efecto de la imagen del payaso en el niño y han descubierto que realmente asusta al 42% de los niños, pero es algo que no es cultural sino biológico porque cuando los niños ven al payaso se asustan porque el maquillaje colorido tapa el rostro y tapar el rostro causa miedo en unos momentos en los que no se conoce la identidad de la persona que está detrás.
ENS: ¿Considera que ocultar esa identidad en Colombia podría ser utilizado con otro tipo de fines como robar?
EC: En varias zonas de Colombia estamos adelantados a los payasos en tiempo porque por ejemplo en Santander tenemos los matachines pero no son de octubre, esa es la diferencia y ya es una tradición de hace mucho tiempo, se hacen realmente es en diciembre y no tienen la estética del payaso sino de diablos, incluso los niños los corretean y los que están disfrazados les pegan o en el norte se tiznan, les dicen los tiznados, entonces tienen un montón de aceite quemado y los embadurnan, pero realmente lo que está sucediendo ahí es otro tipo de manifestación cultural diferente al que está ahorita que es más algo que está por las redes.