197 presuntos extorsionistas fueron aprehendidos en desarrollo de una ofensiva nacional que puso al descubierto las modalidades delictivas a las que acudían para intimidar y arrebatar el dinero a cientos de trabajadores formales e informales del país.
Tras cuatro meses de indagaciones y búsqueda de evidencias, la denominada Operación Sicilia se lanzó en Bogotá y 26 departamentos (Cundinamarca, Antioquia, Boyacá, Tolima, Caquetá, Putumayo, Córdoba, Caldas, Risaralda, Cesar, Guajira, Quindío, Valle del Cauca, Nariño, Casanare, Santander, Arauca, Meta, Chocó, Bolívar, Atlántico, Magdalena, Sucre, Huila, Cauca y Norte de Santander).
En total fueron 42 operaciones con 67 allanamientos en los que se incautaron 12 armas de fuego, 21 teléfonos celulares, 27 kilos de estupefacientes y agendas en las que figuraban los nombres de potenciales víctimas. De las 197 capturas realizadas, 188 fueron por orden judicial y las nueve restantes, en flagrancia.
La estrategia interinstitucional ejecutada y coordinada por la Fiscalía, la Policía y las Fuerzas Militares, permitió desarticular en su totalidad a seis bandas delincuenciales. Ellas son: Los Congos en Magdalena, Los Empleados Públicos en Medellín, Los Parmalat en Antioquia, Los Cafeteros en Arauca, Los Socialistas en Norte de Santander y Pescado Frito en Santander. Esta última estaría vinculada al secuestro y posterior asesinato del exalcalde de Cubará (Boyacá) Samuel Bohórquez, ocurrido en agosto de 2014.
Otras 37 organizaciones criminales fueron impactadas, como Libertadores de Vichada y La Cordillera en Risaralda.
En La Operación Sicilia sobresale también la captura de 17 presuntos integrantes de la banda delincuencial Ajizal, señalada de cobrar entre 10.000 y 500.000 pesos semanales a comerciantes, dueños de parqueaderos, transportadores y conductores de vehículos repartidores de alimentos en Itagüí (Antioquia), a cambio de no atentar contra su seguridad.
De otro lado, la desarticulación de la estructura ‘Los Empleados Públicos’, puso al descubierto situaciones como la exigencia de dinero a los habitantes de algunos barrios de Medellín por el consumo de agua, la extorsión a conductores de bus, bicitaxis y mototaxis, por permitirles circular por determinadas rutas; y la intimidación a pequeños comerciantes para que pudieran vender huevos, azúcar o sal.
A los 12 presuntos miembros de la banda Los Pepes detenidos, se les sindica de pedir cada semana entre 10.000 y 30.000 pesos a tenderos de municipios de Atlántico; y los cuatro integrantes de la agrupación criminal Los Gualiva, son judicializados por cobrar hasta 500.000 pesos a comerciantes y transportadores de Soacha (Cundinamarca), como una supuesta ‘colaboración’ para mejorar las condiciones de seguridad.
En Cali fue golpeada la agrupación criminal Los Boqueños, y cayeron 10 presuntos delincuentes que pedían cuotas de dinero entre 5.000 y 10.000 pesos a los habitantes del sector del Vallado, comuna 15 de esa ciudad.
Según cifras de la Policía Nacional, el delito de extorsión registra una caída de 42% en 2017, frente al año anterior. 1.616 extorsionistas han sido capturados y 80 bandas desarticuladas. Todo este esfuerzo institucional ha evitado el pago de cuantías calculadas en 7.000 millones de pesos.
El ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas dijo que “se realizaron 42 operaciones con 67 allanamientos. Allí se incautaron armas de fuego, teléfonos celulares, estupefacientes y agendas e información en las que figuraban los nombres de potenciales víctimas. De las 197 capturas realizadas, 188 fueron por orden judicial y las nueve restantes, en flagrancia”, afirmó el Ministro de Defensa.
Acompañado por la vicefiscal General de la Nación, María Paulina Riveros; el comandante de las Fuerzas Militares, general Juan Pablo Rodríguez; el director de la Policía, y otros mandos de ambas instituciones, el ministro Villegas destacó que este tipo de trabajos focalizados contra la extorsión han logrado reducir ese delito en más de un 40 por ciento.