La tasa de interés de las obligaciones de España a 10 años pasaron este viernes por debajo del 3% en el mercado de renta fija por primera vez desde 2005, reflejando el atractivo que genera la deuda española, en un contexto de mejoría macroeconómica.
En el mercado secundario, donde se negocia la deuda ya emitida, la tasa española de referencia a 10 años llegó a 2,996% poco después de las 09H00 GMT, antes de volver a subir al 3%.
La prima de riesgo, que mide el sobrecoste que paga España por el bono a diez años en comparación con Alemania --país de referencia de la zona euro--, se ha situado en 152 puntos básicos.
En lo peor de la crisis para España, la prima de riesgo había superado en el verano (boreal) de 2012 los 600 puntos, una cifra récord.
"De manera general, por cuestiones de tipo macroeconómico o de flujos (de capitales), todo va en el sentido de una reducción de los tipos de interés (de la deuda) de los países periféricos", según Frédérick Ducrozet, economista de Crédit Agricole CIB.
Gracias a buenos indicadores macroeconómicos, los inversores invierten ahora en deuda de países considerados hasta entonces como frágiles.
España registró en el primer trimestre de 2014 su mayor crecimiento en seis años, de 0,4%, pisando el acelerador tras un alza de 0,2% en el cuatro trimestre de 2013 y de 0,1% en el tercero, en ritmo trimestral.
Antes, el país, sacudido por el estallido de su burbuja inmobiliaria en 2008, había sufrido dos recesiones en cinco años.
Ahora, tras caer un 1,2% en 2013, el PIB español debería crecer un 1,2% en 2014 y un 1,8% en 2015, continuando su aceleración para alcanzar el 3% en 2017, según anunció recientemente el ministro de Economía, Luis de Guindos, calificando estas proyecciones de "prudentes".
Sin embargo, esta ligera mejora en términos de crecimiento no se traduce todavía en el frente laboral. España registraba en marzo una tasa de desempleo del 25,3%, la más alta junto a Grecia en la zona euro.
Pero la tendencia a la baja de las tasas de la deuda, según el economista Ducrozet, debe perdurar "si se mantiene la mejoría económica, lo que es el caso en España (...) , y si no fuera así, el Banco Central Europeo (BCE) estará ahí" para intervenir.
El BCE ha advertido que podría adoptar medidas de apoyo a la economía en la zona euro, particularmente en caso de deflación.
Por otra parte, el mercado aprovechó este viernes por la mañana otro buen indicador que induce al optimismo: el crecimiento del sector manufacturero en la zona euro quedó confirmado en abril, y se extiende al conjunto de los países de la región.
Pero pese al récord de las obligaciones españolas a largo plazo, los inversionistas esperan con expectación el informe mensual de empleo en Estados Unidos, que será el dato más importante de la jornada.