¿Nueva era de las relaciones con EE.UU? | El Nuevo Siglo
Miércoles, 4 de Septiembre de 2013

La Casa Blanca en Washington.

 

A pesar que para el Gobierno entre Colombia y Estados Unidos existe una nueva era en las relaciones entre los dos países a diferencia de hace unos años cuando la lucha contra el narcotráfico y la seguridad eran los temas fundamentales, posiciones encontradas expresaron ex embajadores, senadores y analistas consultados por EL NUEVO SIGLO.

 

El proceso de paz, la disminución de la pobreza, de la violencia y el crecimiento económico es el nuevo marco según el cual el Ejecutivo, la agenda entre los dos países está cambiando las prioridades en la política exterior.

 

 

‘Hay más cooperación’  

 

El exembajador de Colombia en Estados Unidos Juan Carlos Esguerra estuvo de acuerdo con la posición del Gobierno al decir que el ascenso de Colombia en el escenario internacional ha llevado a que los temas se hayan extendido a acuerdos de cooperación en diferentes aspectos.

 

“Es así. La dinámica de la geopolítica mundial por una parte y el papel que juegan Estados Unidos y Colombia en el hemisferio por otra, así lo demuestran. Los intereses comunes que tienen, el ambiente de confianza mutua ha rediseñado totalmente las relaciones entre los dos países. Hoy día no es tanto que se hayan olvidado los temas tradicionales, sino que hay muchos más temas de los que había antes, más intereses y alianzas”, precisó Esguerra.

 

Según el exembajador, esto se refleja en el papel que en la actualidad juega el país en el continente. “Las relaciones en el marco de la realidad interamericana de hoy día son completamente distintas. Sí hoy se mira a América se encuentra que en ella Colombia juega como aliado de los Estados Unidos, que es geopolíticamente mucho más importante de lo que ha jugado en otros momentos”, señaló el también exministro.

 

Esguerra aseguró que los efectos del proceso de paz seguramente traerán nuevos cambios en el aspecto militar.  “Seguramente sí, pero en esa materia es mejor esperar cómo se desarrollan los acontecimientos, pero en todo caso es claro que en ambos países existe confianza y la tranquilidad de que estamos viviendo un muy buen momento de las relaciones, lo cual ayuda en todos los campos, que el interés del uno sea el interés del otro”, indicó.

 

Sobre posibles renegociaciones del TLC con Estados Unidos, dijo que  “todavía  es un poco prematuro para adoptar una posición sobre el particular, de decir si ha sido bueno o malo, es muy pronto para eso porque estamos viviendo las primeras experiencias del tratado”.

 

‘Seguridad sigue siendo prioridad’

 

 

A diferencia de la posición estatal, Vicente Torrijos, politólogo internacionalista de la Universidad Javeriana, sostuvo que la lucha antidrogas y el combate de grupos al margen de la ley seguirá siendo prioridad para Estados Unidos.

“Estados Unidos tiene una agenda estratégica de largo plazo, en donde ha quedado claro que a pesar de la estrategia de Colombia para modificar el manejo del problema de las drogas, ni los países del área, con contadas excepciones, ni los Estados Unidos, han secundado la idea, por lo que la lucha antidrogas sigue siendo prioritaria. Esto quedó en evidencia en la visita del secretario de Estado John Kerry a Colombia, donde el principal tema fue el de la seguridad compartida”, afirmó.

Torrijos se arriesgó a decir que el tema del canal de Nicaragua y el fallo de La Haya serán temas que por ser de interés continental entrarán en la agenda entre los dos países.

“Aunque el presidente Santos quiera dedicarse solo al libre comercio y al proceso de La Habana,  es claro que el terrorismo sigue estando en lugares prioritarios. En ese sentido Colombia va a seguir necesitando la colaboración de Estados Unidos en tres campos específicos: el  primero, Nicaragua y todo lo que significa la construcción de un canal; los efectos del fallo de La Haya como un posible nuevo pleito cuando el país centroamericano pretenda que se le reconozca la plataforma extendida, y la seguridad hemisférica, concretamente el problema de Siria”.

Frente a las presiones de diferentes sectores sociales para que  se renegocie el Tratado de Libre Comercio por los efectos negativos que ha generado en la agroindustria, señaló que  este es un tema cerrado. “Las Farc y la Marcha Patriótica van a someter al Gobierno para que se enfrasque en una renegociación de los TLC. Lo cierto es que es un capítulo cerrado. En lo estructural el Gobierno ha llegado a la conclusión de que no puede firmar más tratados”, recalcó.

Sobre las ayudas militares en caso de que se dé un proceso de paz, precisó que es previsible que la nación norteamericana espere los resultados de este antes de parar estos recursos.

“A pesar de que ha expresado su respaldo al proceso de paz, creo actuará igual que en el proceso del Caguán, donde hasta no comprobar la conducta del adversario, no tomó decisiones al respecto ya que todo proceso de desmovilización y de reinserción suponen unos esfuerzos en materia de seguridad muy altos”, puntualizó.

 

 

Droga sigue en la agenda 

 

Al contrario de la visión del Ejecutivo para la senadora de la Comisión Segunda que trata las relaciones exteriores del país, Alexandra Moreno, el tema del narcotráfico seguirá siendo tema de discusión.

 

“No creo que el narcotráfico no siga siendo tema entre las dos naciones. Es algo que por el contrario hay que profundizar de la misma forma que hoy estamos viendo en detalle la apertura comercial”, expresó.

Frente al papel de Luis Carlos Villegas, embajador designado en Washington, la senadora declaró que debe aprovechar su conocimiento del sector industrial para hacer una verdadera apertura de los productos colombianos.

“Lo que es cierto es que el nuevo embajador debe aprovechar el conocimiento de todos los gremios, de esos componentes comerciales que necesitan una real apertura. El TLC simplemente generó unos espacios de acuerdo pero su implementación es clave, esto requiere eliminar tantas medidas fitosanitarias, revisar los obstáculos que tienen los productos para entrar a Estados Unidos, toda esa letra menuda es la que le corresponde al nuevo embajador para que haya un real acceso de los productos colombianos”.

 

Sobre los comentarios de que el tema de Nicaragua tomará fuerza entre los países, Moreno expresó sus reservas en la medida en que varias multinacionales norteamericanas están interesadas en la obra. “Hay que ver en qué se compromete en eso Estados Unidos porque detrás de esos contratos millonarios petroleros están multinacionales norteamericanas, ese apoyo hay que revisarlo en el marco de las ambiciones expansionistas de Nicaragua”, expresó.

 

 

‘Sí hay otros temas’  

 

 

El senador de Cambio Radical e integrante de la Comisión Segunda, Carlos Fernando Motoa, estuvo de acuerdo en que entre los dos países se han venido dando otros temas diferentes al de la droga y lo comercial.

 

“La agenda no solo es narcotráfico sino que se han generado otros espacios de integración económica. Uno de esos gestos es la prórroga de los visados para los colombianos a 10 años. Eso demuestra la confianza que se tiene en el Gobierno actual. No se puede desconocer que Estados Unidos es el primer socio comercial de Colombia”, dijo.

 

Al mismo tiempo descartó el regreso a la mesa del TLC para renegociar varios puntos del acuerdo. “Es un desconocimiento real de la problemática decir que el acuerdo comercial con Estados Unidos ha generado la crisis con el sector agrícola. No creo que en un año de vigencia se hayan presentado los problemas estructurales del campo. En lo que se ha podido implementar en el acuerdo, que no supera el 6% de las importaciones antes del convenio, no creo que haya generado el dramatismo que se comenta ya que el tiempo de vigencia es muy corto aún, todavía no se pueden medir los efectos. No creo que se presente alguna salvaguarda o alguna modificación del Tratado”.

 

También consideró que posiblemente la paz y el posconflicto cambien los temas. “Estados Unidos ha apoyado los diálogos. Ese apoyo en el posconflicto va a ser importante. Se daría cooperación en las posibilidades de generar emprendimiento, de recursos humano, de tecnologías e innovación que es a lo que debería apostarle Colombia en ese escenario como herramienta de desarrollo económico”.

 

 

Cooperación judicial 

 

 

Para Pedro Medellín, doctor en Ciencia Política de la Universidad  de Sorbonne de París, el cambio más importante que se podría dar entre las dos naciones, son los acuerdos judiciales que se den como consecuencia de los delitos de narcotráfico que afirma serán tratados en el acuerdo entre el Gobierno y las Farc.

 

“Hay un cambio de enfoque fuerte en la relación entre los dos países pero muy marcado sobre lo que le puede prestar Estados Unidos al proceso de paz colombiano, esto en los componentes de justicia y en el componente que tiene que ver con el tema del narcotráfico, en el proceso de negociación con  las Farc. Allí se va a llegar a un punto de la conexidad con el narcotráfico, ahí va a ser muy importante el apoyo que den los norteamericanos y en ese sentido las relaciones hay que redimensionarlas en los términos de la cooperación que se dé en ese proceso”,  anotó.

Sobre el tema comercial no previó cambios debido a que el embajador designado Luis Carlos Villegas estuvo en todo el proceso de aprobación de estos acuerdos.

“No habría ningún cambio en esa materia, eso se ratifica con el nombramiento de Luis Carlos Villegas como nuevo embajador. Él participó de la negociación del TLC con Estados Unidos, él conoce muy bien ese proceso”, concluyó.

 

 

Embajadores entrantes 

 

Tras la renuncia de Carlos Urrutia en el mes de julio, el Gobierno nombró al  presidente de la Asociación Nacional de Empresarios (ANDI), Luis Carlos Villegas, como nuevo Embajador de Colombia en Estados Unidos. Villegas asume el cargo tras haber estado como integrante de la Mesa de Negociación entre el Gobierno y las Farc.

El empresario risaraldense, estuvo al frente de la  ANDI 18 años, fue Viceministro de Relaciones Exteriores y directivo de la Federación Nacional de Cafeteros.

 

De otra parte el Gobierno estadounidense nombró a Kevin Whitaker como nuevo embajador de Estados Unidos en Colombia. Actualmente se desempeña como subsecretario de Estado adjunto para Suramérica. Egresado de la Universidad de Virginia, su Estado natal. Sería este su primer cargo de embajador, aunque tiene experiencia como diplomático en Gran Bretaña, Jamaica, Honduras, Nicaragua y Venezuela. Ejerció de director de la oficina de Asuntos Andinos en Washington. En 2005 ganó el Premio del Secretario de Asuntos Públicos y Diplomacia Pública.

Reemplazará a Michael McKinley, quien estuvo tres años como embajador de Estados Unidos en Colombia.