Noruega anunció la entrada en vigor de sanciones similares a las dictadas por la Unión Europea contra Rusia, una medida que pesará sobre sus importantes exportaciones de pescado hacia este país.

"Rusia no demostró su voluntad de contribuir a una tregua y una solución en el este de Ucrania, sino que al contrario contribuyó a una escalada del conflicto con su apoyo activo a los separatistas prorrusos", declaró el jefe de la diplomacia, Boerge Brende, en un comunicado.

"La situación en el este de Ucrania empeora cada día. Es importante que la comunidad internacional esté unida en su reacción a las actuaciones de Rusia", añadió.

El 30 de julio, Noruega, que no es miembro de la UE pero está asociada a través del Espacio Económico Europeo, había anunciado ya su intención de sumarse a las sanciones europeas tomadas contra Moscú pero precisó que quería consultar primero con el Parlamento, lo cual hizo.

El gobierno de derechas desde entonces ha recibido el apoyo de la oposición de izquierdas.

En respuesta al papel desempeñado por Rusia en la crisis ucraniana, la UE adoptó el 29 de julio una nueva serie de sanciones contra Moscú que limita el acceso a los mercados financieros de la UE, prohíbe la venta de armas, de tecnologías sensibles en el ámbito de la energía y de bienes de uso civil y potencialmente militar a Rusia.

En represalias, Rusia decidió suspender la mayoría de sus importaciones agroalimentarias procedentes de Europa.

Esta medida golpea duramente a los criadores noruegos de salmón para quien Rusia ha sido, de 2011 a 2013, el principal mercado.

El año pasado, Noruega exportó 295.000 toneladas de pescado hacia su vecino ruso, por un valor de 6.500 millones de coronas (776 millones de euros o 1.040 millones de dólares). El salmón y la trucha sumaron el 81% de estas ventas.