Noche negra en la Ciudad Luz | El Nuevo Siglo
Sábado, 14 de Noviembre de 2015

Atentados casi simultáneos en al menos seis lugares ensangrentaron París dejando 120 muertos, según la AFP, y 153 de acuerdo con CNN, así como un  doscientos heridos, ochenta de ellos de gravedad, en una noche de horror que tuvo como epicentro una sala de conciertos y otros lugares en inmediaciones del Stade de France.

El presidente francés, François Hollande, quien hubo de ser evacuado del mencionado estadio donde presenciaba el encuentro amistoso entre su país y la selección alemana, declaró el estado de emergencia, anunció el cierre de las fronteras del país y pidió refuerzos militares para hacer frente a estos "ataques terroristas sin precedentes".

La policía dijo que más de 100 personas murieron en el Bataclan, en el este de París. Unos 1.500 espectadores se encontraban en el interior de esta conocida sala en la que actuaba el grupo estadounidense de rock Eagles of Death Metal cuando irrumpieron los asaltantes.

"Dos o tres individuos a cara descubierta entraron con armas automáticas de tipo kalashnikov y empezaron a disparar de forma indiscriminada contra la gente", contó un periodista de la radio Europe 1, Julien Tierce, quien estaba dentro.

"Duró unos 10 o 15 minutos. Fue sumamente violento y hubo una ola de pánico", agregó.

Otro testigo explicó a la emisora France Info que uno de los atacantes gritó Alá Akbar" ("Dios es grande) antes de abrir fuego. "Les oía cargar (...) seguían disparando contra la gente (...) pasamos por encima de los cuerpos, es una pesadilla", agregó con voz quebrada por el llanto.

Los presuntos autores del ataque justificaron sus acciones por la intervención francesa en Siria, relató un testigo a la AFP. "Les he oído decir claramente a los rehenes: 'La culpa es de Hollande, la culpa es de vuestro presidente, no tiene por qué intervenir en Siria. Hablaron también de Irak", declaró Pierre Janaszak, de 35 años, que estaba en el Bataclan.

A varios cientos de metros del teatro Bataclan, en la calle Fontaine au roi, la terraza de la pizzería La Casa Nostra fue blanco de un ataque. Varias ráfagas de una "ametralladora automática" abatieron indiscriminadamente a al menos cinco personas, según un testigo, Mathieu, de 35 años.

"Había al menos cinco muertos a mi alrededor, otros en la calle, sangre por todos lados. Tuve mucha suerte".

Otro testigo explica que vio "un Ford Focus negro que disparaba y, después varios cartuchos por el suelo".

Según una fuente judicial, otro ataque dejó también un muerto en el bulevar Voltaire, sin que se sepa a qué distancia se encontraba del Bataclan, situado en este mismo bulevar.

Un poco más al norte, un tiroteo tuvo lugar en el cruce de las calles Bichat con Alibert, en la terraza del restaurante Le Petit Cambodge. Balance: 14 muertos.

"Fue surrealista, todo el mundo estaba por el suelo, nadie se movía", explica una testigo de los hechos. "Estaba todo muy tranquilo, nadie comprendía lo que pasaba. Un joven portaba en sus brazos una chica. Parecía estar muerta", añadió.

Las mismas escenas de guerra en la calle de Charonne, un poco más al este, donde murieron 18 personas.

Un hombre dice haber escuchado disparos durante "dos, tres minutos", "ráfagas". "Vi varios cuerpos ensangrentados por el suelo. No sé si estaban muertos", asegura. Según él, un café y un restaurante japonés fueron el blanco de los disparos.

Tras el asalto de las fuerzas de seguridad en el Bataclan, Hollande se trasladó a la sala de conciertos acompañado por varios ministros y canceló el viaje previsto el domingo a Turquía para asistir a la cumbre del G20.

Esta matanza se produce el mismo día en que Francia restableció durante un mes los controles en las fronteras con motivo de la conferencia de la ONU sobre el clima (COP21), que se celebrará del 30 de noviembre al 11 de diciembre en París. No se ha denegado ni confirmado la realización de este importante evento.

La ciudad ya había sido blanco a principios de enero de atentados yihadistas contra el semanario satírico Charlie Hebdo y un supermercado kósher en París, que causaron 17 muertos.

Además de la toma de rehenes del Bataclan, al menos cinco personas perdieron la vida en tres explosiones cerca del Stade de France, donde se disputaba un partido internacional amistoso entre Francia y Alemania.

Al menos una de esas explosiones fue provocada por un suicida, algo que no había ocurrido nunca en la historia reciente de Francia. El estadio, en el que había 80.000 personas, estas fueron inicialmente trasladadas a la gramilla y posteriormente, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad, se realizó la evacuación.

 

El jefe de Estado presenciaba el partido junto al ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank- Walter Steimeier, y fue evacuado.

Los demás ataques y tiroteos se produjeron cerca de la céntrica plaza de la República, en zonas muy animadas en las noches durante los fines de semana.

Ante la gravedad de los atentados, la policía y el ayuntamiento recomendaron a la población que permanezca en sus casas "salvo necesidad absoluta".

En París, se desplegaron numerosos equipos de socorro y varios sectores fueron acordonados por las fuerzas de seguridad.

La comunidad internacional condenó con firmeza los ataques, que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, calificó de atentado "contra toda la humanidad".

Francia participa desde hace dos años en la coalición antiyihadista que combate al grupo Estado Islámico en Irak, y en octubre extendió los bombardeos a Siria.

El presidente francés François Hollande afirmó que Francia llevará a cabo una guerra "implacable" contra el terrorismo, luego de los atentados que causaron al menos 120 muertos en París.

"Queremos estar aquí, entre los que vieron cosas atroces, para decirles que llevaremos a cabo la guerra, que será implacable", afirmó el jefe de Estado frente a la sala de conciertos Bataclan,.

En el ministerio del Interior se instauró una célula de crisis y Hollande convocó un consejo de defensa para hoy en la mañana.

Ocho "terroristas" murieron en los atentados en París, siete de los cuales se hicieron estallar, según un primer recuento de los investigadores, dijo a la AFP una fuente cercana a la investigación.

Cuatro de los atacantes murieron en la sala de conciertos el Bataclan, tres de ellos cuando activaron sus cinturones de explosivos, y el cuarto durante el asalto lanzado por la policía. Además, tres suicidas murieron en el Estadio de Francia y otro en el bulevar Voltaire, cerca del Bataclan, dijo la fuente.

El asalto policial "fue muy difícil: los terroristas se encerraron en el piso de arriba, se hicieron estallar, tenían cinturones de explosivos", declaró a la prensa el prefecto de policía Michel Cadot. "Tres de ellos se hicieron estallar con sus cinturones de explosivos y otro, que también llevaba un cinturón, fue alcanzado por balas de la policía antes de estallar al caer", añadió una fuente cercana a la investigación.

La investigación abierta tras los atentados permitirá saber si hay "cómplices o coautores" que andan sueltos, declaró el fiscal de París, François Molins.

Según las autoridades, habría por lo menos siete atacantes, cuatro de ellos en la sala de conciertos Bataclan y al menos tres en el Stade de France, situado en la periferia norte de París/El Nuevo Siglo con AFP