El tribunal de aforados continúa siendo el centro de debate en la reforma de equilibrio de poderes.
Según la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático, “en la reforma evidentemente no hay ningún tribunal de aforados, ni nada por el estilo, lo que se hace simplemente es remplazar la Comisión de Acusaciones con unos magistrados distintos, pero mantiene todo el juicio político que debe hacer el Congreso antes de que llegue al juzgamiento de sus pares a los altos magistrados”.
Agregó que lo que se ha dicho sobre el tema es que se necesita justicia para todos los integrantes de los altos cargos del Estado, que no debe haber justicia de cuello blanco y que por lo tanto hay que tener un tribunal que sea capaz de hacer la investigación en una instancia distinta.
Para el senador conservador Eduardo Enríquez Maya, “la propuesta que se hace es igual a la que aparece en la reforma a la administración de justicia del 2012. Tengo que defender la propuesta que con los señores congresistas se aprobó en la reforma de administración de justicia”.
Pero, además, la polémica se extendió a los efectos que podría tener el tribunal. Valencia indicó que “lo que está proponiendo el Gobierno no cambia absolutamente nada, por eso vamos a insistir, en lo que aprobó la Comisión Primera, que es un tribunal de 9 miembros, tres dedicados hacer la instrucción de la investigación, tres para la primera instancia, tres para la segunda y así haya un juzgamiento y una sanción en caso de que sea necesario”.
Aseveró que lo que no se puede continuar es lo que hay en la constitución de 1991 y ahora ampliado. “Es que por ejemplo un magistrado de una alta Corte comete un delito, hoy tendría que presentarse denuncia ante la Comisión de Acusaciones y finalmente hay méritos para acusarlo se lleva a la Cámara y todos votan que sí, se pasa a la comisión de juzgamiento del senado, que si se encuentra un delito la plenaria se aprobaría y solo entonces llegaría a la Corte Suprema”.
Enríquez Maya anotó sobre este mismo tema que “las instituciones no hacen a los hombres, los hombres hacen a las instituciones y si se elige a magistrados con calidad, que tienen los señores magistrados de las altas cortes considero que ese tribunal desempeñaría funciones similares a las que de desempeñan los señores magistrados de las sala de sala de casación”.
Acerca de si en el tribunal de aforados están todos los que son, la legisladora del Centro Democrático dijo que “por supuesto que no, yo creo que debe haber una justicia diferenciada para el Presidente y el Vicepresidente que son figura políticas, pero para los otros lo que debe haber es una justicia con garantías, que le dé a los colombianos la certeza de que porque ocupa un alto cargo no va estar excluido a la ley”.
Sobre la conformación del tribunal señaló Enríquez Maya que “hasta que no se integre no se puede adelantar la integración de las personas, ni las funciones a cumplir. Una vez que se conforme podemos dar plenas garantías de si cumple las garantías que fija la Corte y si los señores magistrados hacen gala del carácter y del deber que están llamados a cumplir”.