“Ante estas graves ambigüedades éticas y jurídicas, es deber ineludible de la Iglesia Católica manifestar ante sus fieles y ante el pueblo colombiano, que no existe otra familia que la constituida en su origen por la unión del hombre y de la mujer”.
Con estas categóricas palabras, el cardenal Rubén Salazar, presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, les pidió a jueces y notarios que se nieguen a unir parejas del mismo sexo como lo dispuso desde hace varios meses la Corte Constitucional.
Tras fracasar en el Congreso un proyecto de ley que buscaba permitir el matrimonio gay en Colombia, quedó vigente una sentencia de la Corte que indica que los jueces y notarios quedan facultados para celebrar actos solemnes de vínculo marital, que legalmente no serán denominados matrimonio, a partir de mañana.
“La conciencia no puede ser violentada. La conciencia es sagrada y hay que respetarla”, dijo Salazar, tras reiterar que para la jerarquía católica “no existe otra familia que la constituida en su origen por la unión del hombre y de la mujer”.
“Ninguna ideología puede cancelar del espíritu humano la certeza de que el matrimonio y la familia existen, únicamente, entre dos personas de sexo opuesto que por medio de la recíproca donación tienden a la comunión de sus personas y a la procreación”, agregó.
“El argumento que siempre se ha esgrimido es el de la discriminación, pero se discrimina cuando se le niega el acceso a un derecho que se tiene, pero cuando no hay un derecho real entonces no hay discriminación”, aseguró el cardenal.
“¿Qué es lo que se le está negando a la comunidad homosexual? Se le está negando algo que no le compete, algo a lo que no tiene derecho, porque el matrimonio y la familia están basados por leyes naturales fundamentales”, añadió.
Para Salazar es necesario “oponerse de forma categórica a cualquier reconocimiento jurídico de las uniones homosexuales que conduzcan a la equiparación con el matrimonio”.
“Lo notarios y los jueces no deben ser simples tramitadores de las decisiones de las personas, sino que son actores que solemnizan la situación jurídica que ante ellos se presenta”, aseguró.
Ninguna autoridad del Estado puede obligar a los notarios y jueces a formalizar las uniones homosexuales: “Están en todo su derecho de oponerse a actuar cuando consideren que con su acción están legitimando un acto contrario a su conciencia y a la Constitución”.
Reacción
“Nos preocupa que la Iglesia Católica llame a la desobediencia frente a uno de los organismos más reconocidos, más democráticos y más serios dentro del reconocimiento de derecho como lo es el alto tribunal”, declaró Marcela Sánchez, dirigente de la organización Colombia Diversa, al conocer lo dicho por el prelado.
Sánchez explicó que se trata de “un mandato de la Corte en reiteradas sentencias, no solamente la que se refiere al matrimonio”, en las que “ha reconocido que las familias del mismo sexo somos familia protegidas constitucionalmente en Colombia”.
Mañana
Desde mañana, las parejas del mismo sexo podrán formalizar su unión ante un notario o un juez, según lo previó la Corte en la Sentencia C – 577 de 2011 en caso de que el Congreso no legislara sobre la materia.
Para el superintendente de Notariado y Registro, Jorge Enrique Vélez, las 877 notarías del país están listas para cumplir la sentencia del alto tribunal.
Sánchez rechazó “que el Colegio de Notarios haya creado una figura que no existe en la legislación colombiana” en referencia a la unión solemne de parejas del mismo sexo.
Para ella, “se desconocen los efectos y los derechos que se derivan de ese contrato, un contrato que no se sabe qué requisitos tiene ni qué derechos tengo cuando lo firmo”.
“La sentencia dice que el contrato debe proteger a las familias de parejas del mismo sexo y debe ser superior a la unión marital de hecho. Pero la figura de la que los notarios están hablando es riesgosa y discriminatoria y no cumple esas condiciones que dice la sentencia”, comentó.