El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró este viernes que por el momento "no hay nada de nada" sobre un eventual rescate europeo de la economía española, al término del primer día de reunión de mandatarios de la Unión Europea en Bruselas.
"Hasta que yo no lo comunique no habrá ninguna noticia y de momento no hay nada de nada", dijo Rajoy a la prensa a la salida del Consejo, pasadas la 01H30 GMT.
Rajoy aseguró que no se ha hablado del eventual rescate de España en este encuentro de jefes de Estado y de Gobierno de los 27 miembros de la Unión Europea, dedicado fundamentalmente a perfilar el establecimiento de una supervisión bancaria única para las 6.000 entidades de la zona euro.
"Es la pregunta que me hacen siempre, nadie me ha hablado de esto, no iba en el orden del día y no me consta que nadie haya hablado sobre este asunto", dijo antes de recordar a la prensa que "no se crean lo que vean escrito por ahí".
En cuanto a la supervisión bancaria, que Rajoy calificó de "avance" en el proceso de integración europeo, los dirigentes comunitarios lograron un acuerdo la noche del jueves para el establecimiento "gradual" de la supervisión bancaria en 2013, que permitirá el control de las cuentas de los 6.000 bancos de la zona euro por el Banco Central Europeo (BCE) en 2014.
El BCE tendrá competencia a partir del 1 de enero de 2013 sobre el conjunto del sistema bancario de la zona euro, pero su supervisión será efectiva gradualmente, según una metodología que definirá la institución de Fráncfort, según una fuente, que precisó que la supervisión de los 6.000 bancos de la zona euro empezará "a partir de principios de 2014".
España era uno de los países más interesados en acelerar este proceso ya que permitirá abrir la puerta a la recapitalización directa de los bancos para evitar que contabilice como deuda pública.
La zona euro ha puesto a disposición de España una línea de crédito de 100.000 millones de euros para los bancos en dificultades, aunque se prevé que el Gobierno sólo necesitará 40.000 millones.
Lo que no está definido es si este mecanismo tendrá carácter retroactivo, pero una fuente diplomática española minimizó el problema, al asegurar que ya "ha asumido que no se beneficiará de la recapitalización directa de los bancos".