Nicaragua calificó de poco amistoso al gobierno de Costa Rica y lo acusó de querer cerrar las puertas al diálogo que el presidente Daniel Ortega propuso a las futuras autoridades costarricenses, que serán elegidas el 6 de abril.
La Cancillería nicaragüense instó a la comunidad internacional a "estar atenta" a cualquier intento del gobierno presidido por la presidenta Laura Chinchilla de "sembrar de escollos el camino" para que se "reanuden plenamente los lazos de hermandad".
Las relaciones entre ambos países se mantienen tensas y salpicadas de roces verbales desde finales de 2010, a raíz del diferendo limítrofe por una isla fluvial en el extremo sureste del Caribe, el cual se ventila ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
El canciller costarricense, Enrique Castillo, anunció el martes que su gobierno presentará una nueva demanda contra Nicaragua por la supuesta usurpación de espacios marítimos ofertados a empresas petroleras internacionales.
Según Castillo, la demanda sería presentada antes del 8 de mayo, fecha en que finaliza el mandato de la presidenta Chinchilla y asume el gobierno que resulte electo en la segunda ronda electoral del próximo 6 de marzo.
La diplomacia nicaragüense estima que lo dicho por Castillo "afecta las relaciones entre nuestros países hermanos y pone en evidencia la actitud poco amistosa que ha marcado desde su inicio el actual gobierno de Costa Rica en sus relaciones con Nicaragua".
Costa Rica "prefirió desoír las ofertas de negociación bilateral" y acudió a organismos internacionales y a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por la disputa de soberanía de un pequeño humedal fronterizo y otros temas relacionados con el dragado del río San Juan, agrega la Cancillería.
La CIJ trata la demanda de San José sobre el humedal y sumó otra demanda interpuesta por Nicaragua por la construcción de una vía paralela al fronterizo río San Juan, que Managua alega causa graves daños ambientales a su cuenca./AFP