El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu afirmó que Israel "llevaba a cabo operaciones" en Siria, reconociendo por primera vez que intervenía en el país vecino, desgarrado desde hace cuatro años y medio por una sangrienta guerra civil.
"Llevamos a cabo de vez en cuando operaciones en Siria con el fin de evitar que este país se transforme en un frente contra nosotros", declaró durante una conferencia en el norte del país. "También hacemos todo lo necesario para evitar el envío de armas especialmente letales desde Siria a Líbano", añadió Netanyahu.
Según fuentes concordantes, Israel efectuó más de una decena de ataques aéreos en Siria desde 2013. La mayoría de sus asaltos tenían como objetivo transportes de armas destinados a Hezbolá en Líbano. Hezbolá, enemigo de Israel, combate en Siria junto a las fuerzas del régimen de Bashar el Asad.
Además, el ejército israelí anuncia de forma regular la movilización de su artillería para replicar al lanzamiento de proyectiles desde el Golán sirio, del que el Estado de Israel ocupa una parte.
Mientras que Israel anunció recientemente que un avión del ejército ruso proveniente de Siria había penetrado "por error" en el espacio aéreo israelí antes de dar media vuelta, Netanyahu añadió que "las fuerzas militares israelíes y rusas se coordinan para evitar incidentes". "Los acontecimientos de los últimos días demuestran cuan importante es esta operación para el Estado de Israel", añadió.
Israel se anexionó una parte de los Altos del Golán (noreste) en 1981, después de haberlos ocupado desde la guerra de junio de 1967. Israel y Siria siguen oficialmente en estado de guerra. Israel cuenta con mantenerse al margen del conflicto sirio, pero defendiendo sus intereses.
La situación del alto el fuego en el Golán era considerada como relativamente tranquila, pero se volvió tensa con la guerra desencadenada en Siria en 2011. Desde entonces, caen proyectiles con regularidad del lado israelí de los Altos del Golán.