Narcocultivos en el país disminuyeron 25%: Jife | El Nuevo Siglo
Martes, 4 de Marzo de 2014

Una  fuerte crítica a la legalización de la marihuana en Uruguay y los estados norteamericanos de Colorado y Washington, hizo la  Junta Internacional de Fiscalización y Estupefacientes (Jife) al tiempo que constató  una reducción de los cultivos de coca en América Latina y notoriamente en Colombia.

"En 2012, el cultivo ilícito del arbusto de coca en América del Sur disminuyó a 133.700 hectáreas, que es la cifra más baja registrada desde 1999 y significó un 13% menos que la superficie total registrada en 2011", señala la Jife, el organismo de la ONU.

"En Colombia, la superficie total dedicada al cultivo de arbusto de coca disminuyó en un 25% a 48.000 hectáreas; también se registró una ligera disminución en Bolivia, a 25.300 hectáreas, y en el Perú, a 60.400 hectáreas".

El estudio de la Jife en el análisis sobre Colombia indica que en  2012 se erradicaron manualmente cultivos ilícitos de arbusto de coca en unas 30.486 hectáreas y  otras 100.549  se fumigaron aéreamente. “Esas campañas de erradicación se tradujeron en una disminución del 25% de la superficie de cultivo ilícito de arbusto de coca  ese año. La estimación final de la superficie destinada al cultivo ilícito de arbusto de coca fue de un total de 48.000  hectáreas, la cifra más baja registrada en el país desde 1995. En consecuencia, la fabricación potencial de cocaína en Colombia disminuyó en 2012 a 309 toneladas, 39 toneladas menos que en 2011”.

También destaca que varios países de la región, entre ellos Chile, Colombia, el Perú, el Paraguay y el Uruguay, comunicaron que las cantidades de clorhidrato de cocaína incautadas habían aumentado con respecto a 2011. En 2012, las autoridades de Colombia se incautaron de 188 toneladas  de clorhidrato de cocaína (un aumento del  29%), lo que constituye un amplio porcentaje de la producción potencial de cocaína del país.

En cuanto al número de narco-laboratorios, señala para el caso colombiano que se han reducido gradualmente en una tercera parte en el período comprendido entre 2008 y 2011, en consonancia con la tendencia a la baja del cultivo ilícito de arbusto de coca. En 2012 se destruyeron  2.110 laboratorios de elaboración de base de coca y 246  de fabricación de clorhidrato de cocaína

Agrega que los datos sobre el cultivo de cannabis en América del Sur son escasos. Varios países han informado del  aumento de las incautaciones de cannabis en la región en los últimos años. Por ejemplo, Colombia y Paraguay comunicaron aumentos de más del 100% en las incautaciones de hierba de cannabis en el período de 2007 a 2011 con respecto al período de 2002 a 2006.

Finalmente señala el informe que “el gobierno de Colombia comunicó un aumento de las incautaciones de drogas sintéticas, lo que podría ser indicativo de un mayor uso indebido de esas sustancias en el país. En 2012, las autoridades de Colombia se incautaron cerca de 39.700 comprimidos de éxtasis”

Volviendo a la región, la Jife destaca que las modalidades de la exportación de cocaína a Europa vía África también están variando.

"El contrabando de cocaína procedente de América del Sur a través de África con destino a Europa parece haber disminuido desde 2009, si bien vienen aumentando las remesas enviadas en contenedores y el despacho marítimo de esa sustancia a través de África occidental a Europa", señala la JIFE.

"En 2012 pudo observarse un aumento de la incautación de cocaína en África septentrional y oriental", agrega.

Legalización, tendencia peligrosa

La Jife también considera en su informe anual que la legalización del cannabis en Uruguay en 2013 "marca una tendencia peligrosa".

"La JIFE pone de relieve que la ley aprobada en el Uruguay para legalizar la producción, venta y consumo de cannabis con fines no médicos contraviene lo dispuesto en la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes (...) y recuerda la necesidad de respetar los tratados", subraya.

El pequeño país sudamericano, de 3,3 millones de habitantes, históricamente pionero en legislación sobre cuestiones sociales, se convirtió en diciembre en el primero del mundo en regular el mercado del cannabis y sus derivados.

La iniciativa, de carácter experimental, busca enfrentar al narcotráfico en una región donde las políticas represivas se revelaron ineficaces y condujeron a baños de sangre y a acrecentar el poder de las mafias.

El jefe de la JIFE, Raymond Yans, ya había criticado la medida uruguaya en diciembre pasado, lo cual le valió una viva réplica del presidente uruguayo José Mujica.

"Dígale a ese viejo que no mienta", dijo Mujica en un programa de televisión, cuando se le pidió su reacción a las declaraciones de Yans.

"Que no hable para la tribuna (...), "porque [los funcionarios internacionales] están en un puesto de pedestal se creen que pueden decir cualquier bolazo (disparate)", agregó.

Mujica lamentó igualmente que la JIFE se hubiera abstenido hasta ese momento de criticar la liberalización del mercado del cannabis en los estados norteamericanos de Colorado y Washington.

El informe 2013 de ese organismo de la ONU invalida en todo caso esa crítica.

La JIFE "lamenta profundamente las medidas adoptadas en los estados de Colorado y Washington (...) con respecto a la legalización del uso recreativo del cannabis", apunta.

El documento recuerda igualmente que esas medidas "contravienen lo dispuesto en los tratados de fiscalización de drogas, que limita el uso de cannabis a fines médicos y científicos".

Y llama por eso al gobierno federal estadounidense a "anteponer a cualquier otra consideración la salud y el bienestar de la población a largo plazo, en consonancia con el preámbulo de la Convención de 1961"./EL NUEVO SIGLO – AFP