Un grupo de sicarios mató a 11 personas y dejó al menos nueve heridos al atacar a tiros la noche del domingo un centro de rehabilitación para adictos en la ciudad de Torreón, noroeste de México, un territorio donde actúan los carteles de Los Zetas y de Sinaloa.

Los autores de la matanza fueron "hombres armados a bordo de dos camionetas color blanco, quienes descienden de las unidades y comienzan a disparar al interior (del centro). Se reportan 11 muertos y nueve heridos", indicó a la AFP un mando de la policía estatal que pidió el anonimato.

En el momento del ataque unas 30 personas se encontraban en el lugar, según la policía.

El ataque se produjo alrededor de las 21H15 hora local (02H15 GMT del lunes) en el centro de rehabilitación cristiano Tu Vida Sobre la Roca, en la periferia de Torreón, unos 1.000 kilómetros al noroeste de Ciudad de México, explicó la fuente.

Los agresores utilizaron fusiles de asalto AR15 y pistolas 9mm y existe la posibilidad de que haya más heridos leves, dado que testigos presenciales indicaron que algunas víctimas se fueron del lugar por sus propios medios, agregó.

Homero Ramos Gloria, fiscal de Coahuila, dijo a la prensa que cuatro de los muertos ya fueron identificados y que se trabaja en establecer los nombres de las otras víctimas.

Hace casi un año, el 7 de junio de 2011, un atentado similar en otro centro de rehabilitación de esa misma ciudad dejó también un saldo de 11 pacientes muertos y dos heridos.

En 2010 se habían registrado en México otros cinco ataques contra centros de rehabilitación de adictos, todos ellos en ciudades del norte del país.

Los narcotraficantes suelen atacar este tipo de centros por la posible presencia de miembros de bandas enemigas entre sus pacientes o para evitar que los drogadictos entreguen información a las autoridades sobre la forma como se realiza el comercio local de estupefacientes.

La cadena de televisión Milenio señaló que los cuerpos de las víctimas quedaron regados en sillones, el suelo y las camas de la edificación, ubicada frente a un parque en una zona residencial.

Patrullas de la policía federal y del ejército rodearon el sitio, mientras dentro del edificio peritos del Servicio Médico Forense realizaban el levantamiento de los cadáveres.

Igualmente, militares y policías establecieron un cerco de seguridad en torno al hospital de Torreón -a donde fueron llevados los heridos- para evitar que, como ha ocurrido en otras ocasiones, los sicarios intenten ingresar al centro médico para rematarlos.

Torreón, una ciudad de un millón de habitantes en su zona metropolitana, hace parte de la llamada comarca Lagunera, una región sacudida en los últimos meses por la violencia de los carteles del narcotráfico, con balaceras entre bandas y enfrentamientos entre pistoleros y militares.

Según autoridades judiciales la violencia en esa zona es provocada por choques de dos facciones del cartel de Sinaloa -enfrentadas entre sí- y por la irrupción en la zona de Los Zetas, que se disputan el control de rutas para el transporte de cocaína hacia Estados Unidos.