El español Rafael Nadal y el serbio Novak Djokovic, números 1 y 2 del mundo, protagonizarán un fin de semana de lujo para el tenis en Buenos Aires, con encuentros de exhibición, que incluyen al exnúmero 3 y retirado argentino David Nalbandian.

El sábado, Nadal se enfrentará con Nalbandian, revancha de la exhibición que el cordobés ganó la noche del jueves en su provincia 6-4 y 7-6 (6).

Será el último partido del ex miembro de la 'Legión argentina' antes de colgar la raqueta, en un cotejo que se jugará en el estadio montado en el predio La Rural.

Además, habrá un pequeño duelo de dobles, ya que a ellos se sumarán Djokovic y otro argentino, Juan Mónaco.

El domingo, en el mismo escenario, situado en pleno corazón del porteño barrio de Palermo, con una estructura tubular ideada para recibir a 15.000 espectadores, Nadal se enfrentará con Djokovic, a casi dos semanas de la definición que ambos protagonizaron en Londres por el ATP World Tour Finals.

El desembarco de ambas figuras se produce en el marco de una gira sudamericana que también los llevó por Lima (Perú) y Santiago (Chile), para un cierre en Buenos Aires, ciudad que es escenario de un torneo de ATP de los de menor escala del circuito.

En los últimos años, el ATP de Buenos Aires tuvo como principales jugadores al español David Ferrer y al suizo Stanislas Wawrinka, y si bien en 2013 no pudo contar con Nadal, que justo había decidido volver al circuito en la gira sudamericana, hay posibilidades concretas de que en 2014 el número 1 del mundo regrese a la capital argentina a jugar "por los puntos".

Por lo pronto, Nadal y Djokovic volverán a encontrarse en Buenos Aires, horas después de un paseo por el glaciar Perito Moreno, ubicado en El Calafate (provincia de Santa Cruz, sur), donde jugarán unos minutos sobre un transbordador, a pocos metros de la gigantesca estructura de hielo, considerada uno de los más bellos escenarios naturales del planeta.

Lejos del rigor y las tensiones del tour, se entiende que Nadal y Djokovic jugarán de manera relajada en Buenos Aires.

Para pensar en 2014 ya tendrán tiempo, aunque el serbio anticipó que "para tratar de recuperar el número 1 del mundo comenzaré a entrenarme como Rambo", en recuerdo del veterano de guerra que en el cine protagonizaba Sylvester Stallone.

Djokovic contó que en 2013 "hubo dos o tres partidos emocionales que perdí, contra Nadal en Roland Garros y la final del US Open, y contra Murray en Wimbledon. Después del US open me senté con mi equipo, pensamos qué había hecho mal, qué se podía mejorar, y creo que el trabajo pagó, porque en los últimos dos meses y medio tuve un buen final de la temporada".

El serbio no dudo en señalar que "ganar Roland Garros sería un sueño", aunque para ello debería vencer a Nadal, ganador ocho veces sobre la 'tierra batida' de París. En este sentido 'Nole' agregó que "es el más grande desafío porque enfrente está Nadal, pero este año jugamos una semifinal muy larga, muy pareja, y sentí que estuve cerca de vencerlo".