94 bienes que habría adquirido Francisco Oriel Duque Zuluaga, alias ‘Guacharaco’, con dineros producto del contrabando de mercancía china y actividades de narcotráfico, ocupados por la Fiscalía General y la Policía.
Las propiedades estarían avaluadas en $100 mil millones y entre ellos hay un restaurante y parque temático automotriz, carros clásicos, haciendas, condominios y establecimientos de comercio.
El acelerado crecimiento comercial e inmobiliario, las excentricidades y la hegemonía que ejercía Francisco Oriel Duque Zuluaga en el sector de San Andresito de San José, en el centro de Bogotá, fueron objeto de análisis financiero por parte de la Fiscalía General y la Policía a través de la Dijin.
Los peritos contables detectaron que Duque Zuluaga, reconocido por ser unos de los mayores importadores de mercancía de China, figuraba como propietario de un importante número de inmuebles, establecimientos comerciales y sociedades, además registraba varias inversiones de las que no había soportes ni claridad en los informes financieros.
Las supuestas inconsistencias y dudas sobre el origen de los activos tendrían explicación en los presuntos nexos con una red señalada de lavar dineros ilícitos. Las verificaciones evidenciaron que Duque era llamado con el alias de ‘Guacharaco’ y mediante diferentes operaciones comerciales habría ocultado recursos de Helmann Yesid Novoa, un señalado narcotraficante de cocaína y heroína capturado en 2012; de José Delio Pineda Gómez, alias ‘Carra’, también detenido por sus vínculos con el Clan del Golfo; y del sistemático ingreso de productos de contrabando.
El denominado ‘Zar de la Mercancía China’ habría dado apariencia de legalidad al continuo flujo de dinero ilegal a través de la compra y venta de bienes; préstamos con hipotecas, la constitución de establecimiento comerciales y el englobe de bienes, especialmente en el sector de San Andresito en Bogotá; la creación de marcas de galletas, dulces y elementos cosméticos; y la titulación de fincas, apartamentos y lotes a terceros, como una estilista en Santander y algunos conocidos en su pueblo natal, Santuario (Antioquia).
Ante la contundencia del material probatorio recopilado una fiscal de la Dirección de Extinción del Derecho de Dominio impuso medidas cautelares de embargo, secuestro y suspensión del poder dispositivo a 94 bienes que harían parte del patrimonio de Francisco Oriel Duque Zuluaga, alias Guacharaco, y cuyo valor alcanza los $100 mil millones.
Las diligencias de ocupación se cumplieron en Bogotá, Cota, Cajicá, Silvania y Fusagasugá (Cundinamarca); Santuario y Medellín (Antioquia), Melgar (Tolima), Palmira (Valle del Cauca), Barbosa (Santander), Villavicencio (Meta), Ipiales (Nariño), y Barranquilla (Atlántico).
Bienes afectados
Los bienes afectados con las medidas cautelares de extinción del derecho de dominio están representados en 47 inmuebles, 10 establecimientos comerciales, 10 cuentas bancarias, 3 sociedades y 24 vehículos.
En Bogotá sobresalen 18 inmuebles en el sector de San Andresito de San José que habrían sido englobados, es decir que 4 o 5 bienes con matrículas inmobiliarias distintas fueron demolidos para levantar un solo edificio. Mediante esta figura Duque construyó de 3 a 4 centros comerciales en el sector y aumentó considerablemente el número de locales comerciales.
También llaman la atención casas en los barrios Salitre y Hayuelos, cuyo avalúo podría alcanzar los mil millones de pesos, y en ellas vivían los supuestos socios del denominado ‘Zar de la Mercancía China’.
Fue ocupada una finca de recreo de $400 millones en Melgar; una casa quinta de 4 hectáreas en Fusagasugá y un condominio en Silvania. Asimismo, en zona rural de Palmira (Valle del Cauca) se afectó un lote de 11 mil metros cuadrados que tenía licencias y permisos para construir un complejo urbanístico.
Duque, al parecer, tituló a amigos y familiares varios de sus bienes en Santuario (Antioquia), municipio en el que nació. Son áreas de 2 y 5 hectáreas en las que se desarrollaban actividades agropecuarias y tenían sus casas de descanso. En la búsqueda de bienes supuestamente entregados a terceros fue identificada una finca de 9.939 metros cuadrados en Barbosa (Santander), que figuraba a nombre de una estilista que no tiene capacidad económica ni reporta ingresos para comprar una propiedad de este tipo.
Respecto a las sociedades, la Fiscalía impuso medidas cautelares a tres, una de ellas es la Comercializadora Seúl Ltda., utilizada para la importación de mercancía de China, mover altos inventarios de productos y presuntamente hacer transacciones de cambios de divisas.
El Transportador
En el curso de las investigaciones fue ocupado un restaurante bar temático único en Colombia de razón social El Transportador, ubicado en el kilómetro 2 de la vía Cota – Chía (Cundinamarca). En el lugar se encontraron 17 carros clásicos de colección, 3 aeronaves fuera de servicio utilizadas para uso recreativo, un museo automotriz, y varias atracciones como pistas de buggies, Karts y cuatrimotos.
Adicionalmente, se levantaba un aerotransportador que ya tenía instaladas las bases y los rieles, y se ubicaron dos carros clásicos que quedaron a disposición de los peritos porque serían reliquias de la historia automotriz de Colombia. Uno estaba rotulado como el primer carro que ingresó al país y se trata de establecer si es el modelo auténtico del automóvil marca De Dion–Bouton, que llegó a Medellín en octubre de 1899.
Los accesorios del restaurante son réplicas de carros, herramientas, motocicletas y autopartes. Por ejemplo, la mesa principal es la simulación de un vehículo marca Ferrari y su adaptación habría costado cerca de $100 millones.