La Secretaría de Ambiente, en compañía de la Policía Ambiental y Ecológica, realizó un operativo de control y seguimiento a varias fuentes emisoras de ruido en el barrio El Restrepo, en la localidad de Antonio Nariño.
Durante la jornada se impusieron medidas de suspensión de actividades de la fuente de emisión a tres establecimientos comerciales que estaban superando los estándares máximos permitidos, contemplados en el Artículo 9 de la Resolución 0627 de 2006.
Al respecto el subsecretario de Ambiente, Julio César Pulido, sostuvo que, “en compañía de la alcaldía local de Antonio Nariño y de la Policía Nacional, que siempre están prestas a colaborarnos, impusimos las medidas de suspensión de actividades. Hacemos un control especial en esta zona en el marco del cumplimiento de la acción popular y en respuesta a las constantes quejas que recibimos de la comunidad aledaña, el ruido es un problema de convivencia que afecta a las personas”.
Debido al ruido que se genera en el barrio El Restrepo, en el desarrollo de actividades comerciales de las discotecas, bares y establecimientos de comercio, existe la Acción Popular 2007-00158, que busca proteger los derechos colectivos a un ambiente sano en la localidad.
“A estos establecimientos ya se les había realizado un seguimiento previo donde se determinó el incumplimiento de los decibeles permitidos para la actividad económica y en los horarios establecidos”, agregó Pulido.
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Cabe recordar que desde 2018, esta acción popular obligó a los establecimientos a implementar las medidas necesarias para la insonorización de sus locales. Las mediciones y evaluación de emisión de ruido que ha realizado la Secretaría de Ambiente indican que las medidas de control y mitigación son insuficientes, y por lo tanto han estado infringiendo las normas ambientales en esta materia.
Durante este año, la Secretaría de Ambiente ha llevado a cabo 15 operativos en el sector del Restrepo, donde se ha realizado la medición y evaluación de emisión de ruido en nueve establecimientos de comercio abiertos al público, además se han sensibilizado otros 24.
Entre 2020 y 2021 la autoridad ambiental de Bogotá ha impuesto 25 multas que superan los 200 millones de pesos a establecimientos que incumplieron la normatividad en materia de ruido.
“Hacemos un llamado a todos los sectores productivos a que establezcamos parámetros de convivencia en temas de ruido, a entender que Bogotá, así como necesita actividades económicas activas, también necesita descanso y una convivencia armónica del territorio”, concluyó el subsecretario de Ambiente.