Sin rastro de 112 militares desde 1992 | El Nuevo Siglo
Diana Rubiano / El Nuevo Siglo
Martes, 9 de Julio de 2019
Eduardo Carrillo
El rastro de 68 militares se perdió, al parecer, en manos de las Farc, mientras que 10 habrían caído en poder del Eln y de los otros 34 no se ha establecido quiénes son los responsables
 

El drama para algunas familias se ha ido prolongando en el tiempo y aunque no pierden la esperanza de tener noticias de sus seres queridos, la ilusión se va desvaneciendo para los parientes de 112 uniformados del Ejército, reportados como desaparecidos.

De acuerdo con la información oficial conocida por EL NUEVO SIGLO, 68 de los miembros del Ejército Nacional fueron desaparecidos, al parecer, por la guerrilla de las Farc, mientras que otros 10 por el Eln y de los otros 34 no se ha establecido quiénes son los responsables de su desaparición, entre ellos uno luego de sufrir un accidente aéreo en actos del servicio.

Según las listas oficiales, en total son 78 soldados desaparecidos, entre ellos: 22 soldados profesionales, 27 soldados regulares, 25 soldados voluntarios, un bachiller y dos dragoneantes.

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Igualmente las cifras consignan que un sargento viceprimero, ocho sargentos segundos, ocho cabos primeros, cuatro cabos segundos y un cabo tercero están desaparecidos.

También se registra la desaparición de dos oficiales en el grado de teniente del Ejército.

89 de las víctimas fueron desaparecidas cuando se encontraban de permiso, de las cuales 40 realizaban actividades personales, mientras que otras 47 fueron interceptadas en bloqueos de vía o los llamados retenes ilegales y los otros dos fueron sacados de sus viviendas por elementos armados no identificados.

EL NUEVO SIGLO conoció que 13 uniformados fueron desaparecidos en medio de combates con elementos de las Farc y del Eln, mientras que otros cinco se encontraban realizando labores de inteligencia y los cinco restantes adelantaban actividades propias del servicio.

Búsqueda

Las cifras oficiales revelan igualmente que en 1992 fue desaparecido un militar y hasta la fecha se desconoce qué suerte corrió, pero los servicios de inteligencia continúan su búsqueda.

De acuerdo con la información oficial en 1996 fueron desaparecidos tres militares; en 1997, 10; en 1998, 19; en 1999, 13; en el 2000, 11; en 2001, nueve; en 2002, seis; en 2003, nueve; en 2004, 11; en 2005, tres; en 2006, dos; en 2007, cinco; en 2008, dos; en 2011, dos; en 2012, uno; en 2015, dos; y en 2017, uno.

La Jefatura Jurídica del Ejército reveló que cinco de los uniformados desaparecieron en el departamento del Magdalena; seis en el Cesar, uno en Córdoba, cuatro en Santander, 37 en Antioquia, siete en Arauca, uno en Casanare; dos en el Vichada, siete en Cundinamarca, uno en el Tolima, seis en el Meta, tres en Valle del Cauca, tres en el Huila, cuatro en el Cauca, dos en Nariño; 12 en Putumayo y 11 en el Caquetá.

Así mismo, se indicó que los soldados Jairo Cubillos Pretel, Diego Fernando Nieto Serna, Hermes Escobar Correa, Jhon Parra Acevedo, Jhon Calderon Pernett, Luis Henao Restrepo, Benigno Flórez Montalvo, Luis Pestana Mesa, Luis Zambrano Durango, Juan Carabalí Mantilla y Carlos Tulcán Pinta, se encontrarían en poder de las otrora Farc.

Y, en poder del Eln se encontrarían el sargento segundo Alexander Herrera Hurtado y los soldados Armilton Córdoba Arcos, Bladimir Córdoba Becerra, Arturo Pabón Manuel; Alexander Quintero Galvis, Yovan Morales Piñeros, Harvey Rincón Cárdenas y Pablo Enrique Quimbay.

Igualmente se sindica a elementos del frente Domingo Laín Sáenz del Eln del secuestro y desaparición del empleado civil del Ejército, Carlos Granados Hernández, el 23 de noviembre de 1996, cuando se encontraba realizando actividades administrativas y del servicio.

Este Diario conoció que la agente del Servicio de Inteligencia del Ejército, Nilza Barrios Montilla, fue secuestrada y desaparecida, al parecer, por elementos del frente 27 de las Farc, cuando realizaba labores propias de su trabajo en el perímetro urbano del municipio de San Juan de Arama, en el departamento del Meta.

¿Quién los tiene?

Igualmente el Ejército confirmó que se investiga y se trata de establecer que grupos armados al margen de la ley, entre guerrilleros de las Farc y del Eln, paramilitares y las Bacrim, mantienen en su poder al grueso de los uniformados desaparecidos.

Destaca el Ejército que el sargento segundo, Rigoberto Úsuga Durango, fue secuestrado, al parecer, por elementos del frente 34 de las extintas Farc, el 1 de diciembre de 2001, cuando jugaba un partido de fútbol con amigos y cuando se encontraba gozando de sus vacaciones en Uramita, Antioquia.

En su mensaje a las familias de los militares desaparecidos, el comandante del Ejército, general Nicacio Martínez Espinel, indicó que “el sacrificio de estos héroes debe ser honrado con cada una de nuestras actuaciones”.

Agregó que es necesario “recordar a nuestras 112 víctimas que actualmente se encuentran en condición de desaparición; hombres y mujeres que han pertenecido a nuestra gloriosa institución y de las cuales hoy no tenemos noticia”.

Dijo que “el dolor de sus familias, al vivir día a día en la incertidumbre de no conocer el paradero de sus seres queridos, de no saber las circunstancias en las que fueron víctimas de este atroz delito, con la eterna zozobra de no saber si aún se encuentran con vida. Es reprochable”.

De acuerdo con el comandante del Ejército “muchos de los uniformados y civiles desaparecieron en circunstancias en las cuales no ostentaban el carácter de combatientes, pues se encontraban en temporada de vacaciones y licencias, desarmados y en estado de indefensión”.

Insistió en que “nuestro compromiso de la mano con las entidades del Estado, es lograr restaurar sus derechos, los de sus seres queridos y continuar con la búsqueda hasta encontrarlos”.

“Estas cifras nos llevan a reconocer la existencia de militares víctimas de esta conducta, sino a su vez, nos permite exaltar la humanidad de la víctima directa y reconocer a sus familias que hoy claman a los victimarios el derecho a la verdad sobre el paradero de sus padres, esposos, hijos y hermanos”, precisó Martínez Espinel.