Para el Mandatario, jefes guerrilleros pueden hablar de paz y al mismo tiempo dejar el terrorismo
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Nuevamente el presidente Iván Duque insistió en que espera que el Gobierno de Cuba cumpla con la circular de la Interpol y extradite a los jefes del Eln que se encuentran en ese país.
El Mandatario expresó en entrevista con CNN que, si el Gobierno cubano privilegia la relación con los jefes guerrilleros del Eln por encima de la que mantiene con el ejecutivo colombiano, se tendrán que tomar decisiones frente a las relaciones diplomáticas.
“Me preocuparía una cosa y la digo con mucha claridad, si Cuba privilegia su relación con los criminales a su relación institucional con el Estado colombiano, son ellos los que están poniendo en segundo plano nuestras relaciones. Y si es así, tendríamos que sincerarnos y tomar decisiones”, respondió Duque a la pregunta sobre si consideraría una reducción en las relaciones con Cuba si no se cumple con las órdenes de extradición.
Manifestó que es diferente un permiso otorgado a los jefes del Eln para estar en Cuba y continuar con los diálogos de paz que no trascendieron, a que ese país cobije a los criminales. Aseguró que seguirá “perseverando hasta que se haga justicia”.
Para Duque, los jefes del Eln no pueden hablar de paz y al mismo tiempo reivindicarse actos terroristas como el atentado sucedido el 17 de enero de este año contra la escuela General Santander, en donde fueron asesinados 22 cadetes.
En días pasados el canciller Carlos Holmes Trujillo reiteró la solicitud de extradición para Víctor Orlando Cubides, alias ‘Pablo Tejada’ o ‘Aureliano Carbonell’, e Israel Ramírez Pineda, alias ‘Pablo Beltrán’, quienes participaron en la mesa de negociación con el Gobierno y que aún se encuentran alojados en la isla.
“La petición se hace a solicitud del Juzgado Cuarto de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Antioquia, ya que los requiere para que paguen una condena en su contra de 40 años de prisión por los delitos de rebelión, terrorismo, homicidio simple múltiple y lesiones personales múltiples”, expresó Trujillo.
Asimismo, el Ministerio de Relaciones Exteriores aseguró que la solicitud oficial es un llamado a Cuba para que entregue “a la mayor brevedad a las autoridades colombianas a los miembros de la organización criminal”.
Las peticiones del Gobierno a Cuba con respecto a la extradición de los jefes del Eln han sido reiterativas. En ese sentido y con respecto al silencio que ha mantenido La Habana sobre el tema, el presidente Iván Duque afirmó que “Cuba tiene que preguntarse qué prefiere, la relación con Colombia o la relación con los criminales. Yo espero que si en algo se valora una relación con Colombia, se proceda con la extradición de los delincuentes”.
No cometer con el gobierno de Cuba el “mismo error” que habría sido romper relaciones con la dictadura en Venezuela, pidieron esta semana al presidente Duque un grupo de académicos, escritores, periodistas, exministros, entre otros, en una misiva. El llamado se da después que en días pasados el Gobierno reiterara su pedido al Ejecutivo de la Isla a que extradite a los subversivos del Eln que permanecen allí después de participar en los diálogos de paz con la administración Santos, para que respondan en Colombia por el atentado terrorista a la Escuela de Cadetes General Santander y otros delitos.
“En los últimos días han crecido las declaraciones ambiguas de miembros del alto Gobierno en torno de una posible ruptura de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Cuba. Sería un grave error”, señala la misiva que está firmada por el excanciller Rodrigo Pardo; el exministro de Ambiente, Juan Mayr; el exrector de la Universidad Nacional, Moisés Wasserman; el periodista Enrique Santos; el director de cine Sergio Cabrera; y el exasesor de seguridad nacional, Armando Borrero, entre varios.
Añade la misiva que “ya el Estado colombiano se equivocó cuando, tras un agravamiento de las diferencias mutuas, se produjo la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela, a pesar de los numerosos temas de interés común entre dos naciones vecinas. Desde entonces la diplomacia serena ha sido reemplazada por la improductiva ‘diplomacia de los micrófonos’”. Al tiempo que preguntó: “Lo único que se ha logrado con esta política inútil ha sido un escalonamiento de las tensiones bilaterales. ¿Vamos a repetir con Cuba este camino equivocado?”.