Durante la tarde de este miércoles, la Superintendencia de Salud anunció que se adelantó el proceso de intervención forzosa administrativa en el Hospital Departamental María Inmaculada, ubicado en Florencia, Caquetá, tras evidenciar 52 hallazgos frente a la prestación en los servicios.
"Después de haber recibido distintas denuncias acerca de irregularidades en el hospital María Inmaculada de Florencia, Caquetá, adelantó una auditora integral in situ, en el territorio, evaluando los técnicos-científicos, jurídico y financiero de la entidad, encontrando una totalidad de 52 hallazgos, algunos con serias preocupaciones frente a la prestación de servicios de salud", indicó el superintendente Luis Carlos Leal.
El procedimiento se llevará a cabo durante un año desde este 14 de agosto de 2024 hasta la misma fecha de 2025.
El superintendente también indicó que la decisión se tomó debido a la "crítica situación de índole administrativa y financiera, que afecta la estabilidad de la entidad y pone en riesgo la adecuada y oportuna prestación del servicio y salud".
Adicional a los hallazgos anteriormente mencionados, Leal indicó que fueron encontradas irregularidades en el inventario de los medicamentos, señalando que algunos de estos se encontraban vencidos.
“Incumplimientos que no solo afectan la adecuada, continua y oportuna prestación de los servicios de salud, sino que, además, reflejan falencias en la gestión de la gerencia de la entidad, encargada de garantizar que se lleven a cabo todas las gestiones administrativas y financieras necesarias para asegurar pleno funcionamiento de la ESE”, afirmó el funcionario.
Dentro de las falencias también se reconocieron problemas en la atención de urgencias, señalando que existe hacinamiento debido a la pobre gestión de rotación de camas, presentándose una demora en las atenciones médicas "a pesar de tener los servicios instalados y habilitados", según indicó Leal.