José Manuel Gnecco, acusado del asesinato de su esposa María Mercedes Gnecco, fue nuevamente absuelto por un juez, que decidió no imponer una medida de aseguramiento debido a que las pruebas presentadas por la Fiscalia no eran suficientes, luego de ser dejado en libertad por vencimiento de términos y recapturado por presunto soborno de testigos.
El hombre estuvo privado de su libertad luego de ser acusado de la muerte de María Mercedes Gnecco, el 5 de octubre de 2021, pero había sido dejado en libertad previamente por vencimiento de términos, tras haber estado 171 días sin una sentencia. Sin embargo, fue recapturado bajo la sospecha de soborno de testigos, lo que complicó aún más su situación legal.
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Este viernes 3 de mayo luego de varias audiencias, la medida de aseguramiento fue rechazada por un juez de San Andrés, que aseguró que las pruebas dadas por la Fiscalía no eran suficientes para ordenar la privación de la libertad del hombre. Según el informe de un interrogatorio, el preso identificado como Yeral David Pereira Castro afirmó que Gnecco le ofreció hasta 5 millones de pesos para que diera falsas declaraciones.
Pereira Castro, quien se encuentra en la cárcel por porte de armas, relató que Gnecco lo buscó en varias ocasiones e intentó vincularlo como miembro de una organización criminal con la intención de implicarlo en el crimen. A pesar de estas acusaciones, el juez determinó que las pruebas presentadas por la Fiscalía no eran suficientes para ordenar una medida de aseguramiento contra Gnecco.
La decisión ha generado controversia y ha levantado críticas sobre la efectividad del sistema judicial en casos tan delicados como el de María Mercedes Gnecco. Familiares y seguidores de la víctima han expresado su indignación y han exigido que se revisen a fondo las evidencias presentadas durante el juicio.
Este caso resalta la importancia de una investigación exhaustiva y transparente en casos de violencia de género y femicidio. Organizaciones de derechos humanos y grupos feministas han manifestado su preocupación ante la posibilidad de que casos como este queden impunes, lo que podría socavar los esfuerzos en la lucha contra la violencia doméstica.