La oportunidad de aplicar iniciativas de gobierno abierto relacionadas con transparencia, rendición de cuentas, integridad y participación en los planes de desarrollo departamentales se concretará en la elaboración de nuevas estrategias por parte de los mandatarios electos en octubre y que se posesionarán en enero.
Así lo señaló un reciente informe sobre gobernanza pública en Colombia publicado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Esta expectativa fue recordada ayer en Cali, donde se dio apertura a la reunión de la OCDE, el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), la Alianza para el Gobierno Abierto (OGP), el Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD), la Secretaría de Transparencia de la Presidencia y la Alcaldía local.
El objetivo del evento, que concluye hoy, es conectar a los reformadores de la región para intercambiar ideas, experiencias y conocimientos sobre cómo establecer una gobernanza sólida que favorezca a gobiernos más abiertos, conectados e innovadores.
Al respecto, el alcalde de Santiago de Cali, Maurice Armitage, se mostró complacido de ser anfitrión del encuentro y contó la experiencia de su gobierno al respecto de las temáticas a tratar. “En esta administración estamos convencidos de que un gobierno que invierte en lo social, de cara a la gente y basado en la transparencia, con participación y trabajando de manera conjunta con la ciudadanía, puede ser la clave para el progreso”, comentó.
Y agregó que “cuando llegamos a la Alcaldía hace casi cuatro años, se identificó la necesidad de organizar los procesos de tal manera que pudiéramos tener las puertas abiertas para todos los ciudadanos. Por ello, en 2016 se hizo una reforma administrativa centrada en las necesidades de la gente, creamos la Oficina de Transparencia, el Departamento Administrativo de Contratación; de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, y gracias a los resultados en la gestión, hoy somos referente como gobierno local en Colombia y ocupamos el primer lugar en la publicación de datos abiertos”, concluyó Armitage.
En la apertura también intervinieron la secretaria de Transparencia de la Presidencia, Beatriz Elena Londoño; el vicepresidente corporativo de desarrollo social de CAF, José Carrera; y Alessandro Bellantoni, jefe adjunto de División y jefe de la Unidad de Gobierno Abierto de la Dirección de Gobernanza Pública de la OCDE.
El certamen cuenta con la participación de representantes de los gobiernos pioneros e involucrados en reformas de gobierno abierto, gobierno digital e innovación en el sector público de América Latina y el Caribe y en los países miembros de la OCDE.
Colombia
El ya referido informe consideró que el desarrollo de un documento Conpes sobre Estado Abierto podría ser una importante medida para seguir reforzando la cooperación entre el gobierno central y los departamentos, actores clave que contribuyen al éxito de la implementación del documento.
El informe destacó que el desarrollo de la política de gobierno abierto por el departamento de Nariño es una iniciativa pionera, pues son pocos los gobiernos subnacionales de los países de la OCDE que han desarrollado documentos estratégicos sobre gobierno abierto. Tal como ya se ha hecho en otras ocasiones, el gobierno central y el departamento emplean este ejemplo para animar a otros departamentos a adoptar un enfoque más estratégico de gobierno abierto.
El informe señaló, como ya se dijo, que hasta ahora hay pocos planes de desarrollo departamental que contengan iniciativas relacionadas con los principios de gobierno abierto de transparencia, rendición de cuentas, integridad, y participación. La elaboración de los nuevos planes después de las elecciones departamentales de 2019 supone una excelente oportunidad para cambiar esta situación. La participación activa de las partes interesadas en la formulación de los planes (y, posteriormente, en su seguimiento y evaluación) será fundamental. Una mayor coordinación entre el Departamento Nacional de Planeación y las unidades y responsables de políticas públicas encargadas del gobierno abierto en los departamentos podría contribuir a ampliar todavía más el espectro de participación.
Según el informe, si bien los departamentos han ido aumentando su capacidad de planificación y la participación de las partes interesadas en el proceso de política pública, siguen persistiendo ciertas dificultades, como que los departamentos poseen varios instrumentos de planificación que raramente se interrelacionan entre sí y con diferentes plazos de ejecución, lo que limita su capacidad para coordinarlos y para seguir y evaluar los resultados y consecuencias en la política pública.
Además, anotó el informe que los departamentos carecen de recursos financieros y humanos suficientes para dirigir la coordinación horizontal entre diferentes secretarías o unidades. Este hecho constituye una barrera para coordinar e implementar las políticas públicas y evaluar sus resultados de una manera efectiva.
Para la OCDE, sigue habiendo una participación limitada de las partes interesadas en todo el ciclo político, especialmente en el seguimiento y la evaluación de los Planes de Desarrollo Departamental. Si bien las entrevistas realizadas han demostrado que la consulta es una práctica habitual en las primeras fases de los planes, la implicación activa de ciudadanos, ONG y representantes del sector privado y de los medios de comunicación sigue siendo poco común en la fase de evaluación.