Ante el riesgo que conlleva el mal manejo de los residuos hospitalarios en San Andrés, el Tribunal Administrativo del Departamento Archipiélago decretó medidas cautelares que había solicitado la Procuraduría.
Así las cosas, ordenaron adelantar “las gestiones administrativas pertinentes y eficaces con el objeto de brindar o contratar el servicio de transporte, recolección, almacenamiento, desactivación, incineración, tratamiento y disposición final de residuos peligrosos y hospitalarios generados en la red pública”.
Asimismo, el organismo de control pidió a la IPS que, en cinco días calendario, adelante las gestiones necesarias para retirar de las instalaciones del Clarence Lynd Newball Memorial Hospital de San Andrés, del hospital local de Providencia y demás puestos de salud, los residuos hospitalarios y peligrosos que se encuentran en las instalaciones, y que realice la desinfección y limpieza de las zonas donde permanecen acumulados estos desechos.