El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, rechazó los hechos ocurridos en la tarde de este jueves 2 de mayo, en inmediaciones de la Universidad Nacional Sede Bogotá.
Encapuchados protagonizaron bloqueos y hechos violentos evitando la movilidad en la calle 26 por varias horas e incluso generando afectaciones a paraderos del SITP y la infraestructura de la estación de TransMilenio Ciudad Universitaria.
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“Hoy sobre las 3:30 p. m. recibimos información de la presencia de unos encapuchados en inmediaciones de la Universidad Nacional en la NQS. Inmediatamente se activó todo el protocolo que corresponde a la presencia de los Gestores de Convivencia y también en caso de ser necesario la Fuerza Pública”, aseguró el alcalde Carlos Fernando Galán.
El mandatario capitalino expresó que se vencieron las etapas y protocolos establecidos por la Ley y se evacuaron incluso menores de edad que se encontraban en la zona para evitar afectaciones a su integridad.
“Bloquearon la calle 26, había presencia de niños por eso actuaron los Gestores de Convivencia para proteger a los menores de edad y lograr que no estuvieran en ese sitio. Pasado esto, intentaron estos delincuentes encapuchados bloquear no solo la vía, si no además, afectar la infraestructura, quemar inclusive los torniquetes y la estación de TransMilenio”, indicó el alcalde.
Enfatizó que este tipo de hechos violentos no corresponden a manifestaciones, si no ha hechos delictivos que serán perseguidos y se buscará la identificación de los responsables con las autoridades, para que respondan ante la Rama Judicial y los Jueces de la República.
"Se actúo con la Fuerza Pública para reestablecer el orden. Estamos evidenciando este tipo de actuaciones, de encapuchados que no son protestantes, no son manifestantes, son delincuentes que están con violencia, con actos criminales afectando a la ciudad. Que salen inmediatamente a destruir", enfatizó el alcalde Carlos Fernando Galán.
El mandatario aseguró que se seguirá actuando con las autoridades para evitar nuevos hechos violentos y daños a la infraestructura de la ciudad en inmediaciones de la Universidad Nacional y otros establecimientos de educación superior, respetando la autonomía universitaria.