Vía libre al uso de ventiladores experimentales para atender el Covid, los cuales se desarrollan al interior del país, dio el Gobierno Nacional.
Así lo reveló Luis Guillermo Plata, el gerente para la Atención Integral del Covid-19, quien dijo que estos equipos se podrán emplear siempre y cuando el paciente o su familia lo autorice, en la medida que todavía no están certificados por el Invima.
Por el momento son 21 las iniciativas de producción de ventiladores nacionales, que ha recibido el Gobierno. Incluso, que las más avanzadas, son las de la Universidad de la Sabana y la Universidad de Antioquia.
Estas iniciativas ya radicaron sus solicitudes en el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) para evaluación y aprobación.
“Los tiempos no nos dan para surtir todos los procesos de evaluación y certificación del Invima, como sucede con cualquier equipo médico, y para ello hemos encontrado en la ley 23 de 1981, sobre ética médica, que se permite que en algunas situaciones excepcionales productos que no hayan sido certificados puedan ser utilizados en emergencias como último recurso, siempre y cuando tengan el consentimiento del paciente o de su familia”, dijo Plata.
Cabe recordar que, el Gobierno Nacional aseguró que el país este año tendrá 6.228 ventiladores mecánicos para Unidades de Cuidado Intensivo (UCI), con los cuales se aumentará la capacidad de respuesta frente a el Covid-19.
Como informó EL NUEVO SIGLO el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, hizo en mayo un llamado al Invima a acelerar los procesos de validación de los equipo de bajo costo producidos en el país.
Agregó que en el caso de Estados Unidos, la normatividad tiene previsto que en emergencias, los tiempos para el otorgamiento de licencias en materia de salud se reducen. “Incluso ya iniciamos el proceso en la FDA (la agencia de medicamentos y alimentos de ese país) para la aprobación de los ventiladores, y al paso que vamos, creemos que lo vamos a lograr más rápido por Estados Unidos que por Colombia”.
Por su parte, el director del Invima, Julio César Aldana, dijo que “un ventilador es un dispositivo médico de alto riesgo”. Explicó sobre la iniciativa de ventiladores que ha tenido su desarrollo en Medellín, denominada Innspiramed, en cabeza de la Universidad de Antioquia, que “este proceso se inició en abril. Hay unos criterios que son internacionales porque por ser unos dispositivos de muy alto riesgo, se tienen que hacer unas pruebas, no solamente en animales como ya las hicieron ellos, sino también unas pruebas en humanos”.
Añadió que estos prototipos de equipos deben superar otras pruebas, como las electromagnéticas para garantizar que no van a afectar el desempeño de otras máquinas que hay en las UCI. Además que tengan autonomía eléctrica por algún tiempo para prevenir los casos en que se cae el fluido eléctrico.
El funcionario dijo entonces que el Gobierno nacional estaba buscando alternativas para el uso de estos ventiladores y que en los próximos días se haría un pronunciamiento sobre el particular.
Algunos de los prototipos que estudia el Invima (si cumplen los requisitos para ser usados en hospitales) son de la iniciativa en Medellín denominada Innspiramed, por la cual se desarrollaron desde finales de marzo pasado tres prototipos de ventiladores por la Universidad de Antioquia y su grupo GIBIC, Universidad EIA e Industrias San Pedro, junto con el Hospital San Vicente Fundación, quien a su vez actúa como líder clínico de la iniciativa.