El Ministerio de Transporte anunció que se estudia presentar en 2020 un proyecto que se ocupe de temas como las multas
_____________
En septiembre pasado en medio del paro de conductores por las multas de las que han sido objeto, el Ministerio de Transporte reiteró la intención de reformar el Código Nacional de Tránsito, que ya luce obsoleto, pues cumple 17 años, frente a cambios que se han ido dando, como la irrupción de las plataformas. De antemano expertos y gremios del sector consultados por EL NUEVO SIGLO hacen algunas propuestas sobre la modificación de la norma.
El viceministro de Transporte, Juan Camilo Ostos, indicó a propósito del paro de conductores que en septiembre pasado se extendió por un par de días, “queremos decirles a los transportadores que del Ministerio no depende quitar o no las sanciones, se está trabajando en una reforma para el próximo año del Código Nacional de Tránsito, el cual aún está en evaluación”.
Al respecto Juan Miguel Durán Prieto, presidente Ejecutivo de Colfecar (Federación Colombiana de Transportadores de Carga), dijo que cree “necesario que se haga una reforma al Código de Tránsito ya que lleva aproximadamente unos 17 años. Se ha intentado hacerle reformas en varias oportunidades desde el Congreso de la República sin éxito. Ha sido desafortunado que no podamos migrar hacia unas reglas de juego en el tránsito que realmente logren mayor eficiencia en la movilidad”.
Añadió que para el transporte de carga hay varios puntos, “uno de los grandes cuellos de botella es la última milla ¿Qué es la última milla? Es la entrada y salida de las ciudades principales. En ese sentido una reforma al Código de Tránsito sería útil para que estos cuellos de botella se puedan solucionar con unas normas claras frente a la movilidad en los corredores donde está la carga en las diferentes ciudades”.
Puso como ejemplo el directivo “un procedimiento para el levantamiento de accidentes, el cual ayudaría muchísimo a la movilidad. Hay muchos países que ya tienen estos procedimientos con tiempos establecidos”. Señaló que en el caso de Colombia, “a veces cuando se forman grandes trancones uno ve que hubo un pequeño estrellón, y hasta que no llegue la Policía, y eso puede tardar horas, o hasta que no se establezcan ciertos parámetros que no están reglados sino que son unos procedimientos muy a la medida de la situación, pues son causantes de grandes trancones”.
Durán dijo que también es necesario revisar el tema de señalización, “que se pueda evaluar una que le sirva a los diferentes tipos de transporte que se manejan en todas las ciudades, por supuesto que incluyendo al transporte de carga. Y en general todo lo que contribuya a una mayor movilidad para la ciudad y para el transporte de carga en sus diferentes corredores sería importante. Sumado a lo que se ha venido hablando de los conductores de generar unas reglas claras, transparentes y que aseguren que los conductores realmente sean aptos y que cumplan con la normatividad vigente para lograr menos accidentalidad y menos muertos en las vías”.
Añadió que “por supuesto que sería un momento para aprovechar ese esquema que se tiene para la obtención de las licencias de conducción y los diferentes controles al respecto”
Ley general
Marco Tulio Gutiérrez, vocero de los operadores del Servicio de Ingeniería, Tránsito y Tecnología (SITT) en Bogotá y expresidente ejecutivo de Conaltur, indicó que “una reforma al Código de Tránsito tiene, en mi forma de ver, que ver con otros temas. Desde el punto de vista del transporte se requiere la ley general del transporte, que requiere adquirir su mayoría de edad y desvincularse de la vieja visión de la intervención del Estado en ese tema, y se debe pasar a reconocer la mayoría de edad del sector”.
Agregó que “Colombia requiere que el transporte como derecho fundamental obtenga por parte de los prestadores del servicio público un código de garantías en la prestación del servicio”.
En materia de normas de tránsito el experto consideró que “debemos pasar del Estado que asusta, al Estado que define formas de conducta. Quien maneja con embriaguez no se debe sancionar, se debe es penar. Quien maneja fuera de los límites de velocidad lo propio. Esto significa en mi sentir, reitero, que no debemos hablar de códigos sino de normas que regulen un comportamiento adecuado. Que haya motos u otros medios alternativos de movilidad sin exigir que el vendedor dicte los cursos respectivos de conducción, nos lleva a la anarquía que hoy sufrimos”.
No a un Nuevo Código
Tulio Zuluaga, expresidente de Asopartes, dijo que “la verdad no creo que hay que reformar tanto el Código Nacional de Tránsito, cuando lo que hay que hacer es lo que se está pensando: primero, la parte de semaforización que realmente estamos demasiado atrasados. Segundo, tenemos que preparar bien a nuestros policías de tránsito y ubicarlos bien. A veces uno encuentra seis policías mirando el celular y hay un trancón tremendo”.
Agregó: “Lo que falta es que lo que tenemos, hacerlo bien para no ponernos a sacar un nuevo Código. En el país hay demasiadas leyes, demasiadas cosas. Y lógicamente a lo que sí se le debe trabajar muy bien es a lograr unos horarios de transporte y de horario de la gente para que la hora pico se disminuya mucho”.
En este sentido consideró que “si las empresas privadas, por ejemplo, comienzan a trabajar más temprano y salen más temprano, saldrán un poquito después las entidades públicas. Eso es lo que hay que hacer, hay que trabajarle lógicamente al horario de las universidades y los colegios. Hay que trabajarle a las vías y por ahí carriles especiales, poner unos peajes, y el que no quiera pagar el peaje que coja la vía lenta”.
Transporte terrestre intermunicipal
José Yesid Rodríguez, presidente ejecutivo de la Asociación para el Desarrollo Integral del Transporte Terrestre Intermunicipal (Aditt), dijo que “en términos generales es importante distinguir en el tema de infracciones cuáles de ellas afectan directamente la seguridad vial y cuáles no para los efectos que tiene la reincidencia y la suspensión de la licencia de conducción. Ese uno de los temas críticos, sobre todo frente a los conductores de transporte público que como ruedan más por las vías pues están más expuestos a cometer algunas infracciones”.
El otro tema que “nos parece fundamental desde el punto de vista de los transportadores es que la ley establezca herramientas que de alguna manera permitan controlar todas las modalidades de informalidad e ilegalidad en el transporte. Por ejemplo, la moto debe estar claro que es un vehículo solamente para el transporte particular y permitir que las autoridades regionales puedan establecer restricciones a la circulación o por ciertas vías para que esas motos no compitan de manera desleal con los sistemas de transporte público”.
De igual forma dijo que es importante poner en cintura el tema de plataformas tecnológicas “pues toda plataforma tecnológica debe estar al servicio de los usuarios, por supuesto del transporte público y de la formalidad, no de la ilegalidad”.
Agregó que “hay otros temas que puede tratar esa reforma como es migrar a la licencia de conducción por puntos, aspecto que ha tenido relativo éxito en otros países, donde pues la gente tiende a cuidar mucho su licencia y de alguna manera a cuidarse de cometer infracciones porque se le va restando puntos de su licencia y puede llegar un momento en que no puede conducir porque va a quedar suspendida”.
Finalizó “pienso que es importante que este Código nuevo se puede hacer una buena lectura y una buena socialización a nivel nacional y recoja muchas inquietudes que pueda haber al respecto”.