JEP no es un baluarte para la justicia colombiana: Centro Democrático | El Nuevo Siglo
Foto JEP
Miércoles, 4 de Noviembre de 2020
Redacción Política

Mientras Eduardo Cifuentes tomaba posesión como presidente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), a través de un comunicado el Centro Democrático cuestionó declaraciones entregadas el martes por Patricia Llombart, embajadora de la Unión Europea en Colombia, en referencia a ese tribunal de justicia transicional.



La diplomática sostuvo que “la JEP se constituye en un baluarte para la justicia, no solo de Colombia sino del mundo entero. Hoy se le referencia internacionalmente como pionera en los sistemas de justicia transicional”.

La organización política reaccionó comentando que “la JEP no es un baluarte para la justicia colombiana ni un referente mundial como ella afirma. Es un ente burocrático, sin resultados, con abundantes manchas de corrupción y clientelismo, que fue hecho e integrado a la medida de las Farc y no de los intereses de nuestra población”.

“El Centro Democrático no se opone a la paz. Lo que rechazamos categóricamente es que se haya desconocido el resultado del plebiscito de octubre de 2016, en el cual ganó el no y el subsiguiente asalto a la Constitución y al orden jurídico que realizó el anterior gobierno para imponer burdamente el acuerdo, en contra de las mayorías”, anotó la organización política, agregando que “estamos proponiendo que en el referendo se incluya la derogatoria de la JEP o por lo menos que sea sometida a una reforma profunda. Proponemos, entre otras reformas, una Sala Especial para los miembros de las Fuerzas Militares y que de ninguna manera puedan ser congresistas los responsables de delitos atroces, sin antes haber sido juzgados y castigados por sus culpas”.

La colectividad uribista invitó a que Llombart tenga “en cuenta la voz y los intereses de miles de víctimas de delitos atroces, de violencia sexual y de todos los atropellos cometidos por las Farc contra la población, antes de formular comentarios como el que nos ocupa, carentes de fundamento y lesivos para la mayoría de los colombianos”.

Cifuentes

Al posesionarse, Cifuentes convocó "a un movimiento ético y espiritual por la paz, que lo recorreremos todos los días, justamente, para tener Nación y derechos. En esta urna deposito mi compromiso irrevocable por la paz que vale por y cada uno de los días de mi vida".

Cifuentes aseguró que la JEP “es indispensable para alcanzar la paz en Colombia”.

“En Colombia la paz corresponde a un anhelo de todos y de todas. Para alcanzarla la JEP es indispensable. Es una justicia que exige verdad completa y aceptación de responsabilidad. Si esto no se logra, respecto al conflicto que ha desgarrado a Colombia en los últimos 50 años, nuestro destino colectivo e individual será incierto e indigno”, dijo.



También asumió Alexandra Sandoval como vicepresidente reiterándole a Cifuentes su “plena disposición y apoyo en todo lo que venga en estos dos años” venideros. “Las mujeres víctimas del conflicto nos han enseñado a seguir luchando en pie de resistencia”, dijo.

El acto de posesión se dio en una sobria ceremonia que tuvo lugar en Bogotá, en la que también estuvieron presentes los titulares de la Comisión de la Verdad, Francisco de Roux, y de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, Luz Marina Monzón; el jefe de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, y los presidentes de las salas y secciones de la JEP, entre otros funcionarios.

Qué trabaje

El martes, el procurador Fernando Carrillo le pidió al país dejar trabajar a la JEP en paz y lanzó un llamado a respetar esta jurisdicción que pese a tantas dificultades “ha hecho en tres años en materia de esclarecimiento de la verdad mucho más de lo que hizo la justicia ordinaria en 50 años”.

En su intervención en la presentación del balance de gestión de la magistrada Patricia Linares, predecesora de Cifuentes al frente de la JEP, Carrillo advirtió que “lo mínimo que se les puede exigir a los contradictores de la jurisdicción es lealtad en el argumento y no acudir a esos lenguajes o dinámicas bélicas del debate político que muchas veces han querido lesionar la integridad de la JEP”.

Enfatizó en que algunos olvidan que la JEP “es una alta corte de justicia y de paz. Un doble contenido que implica no solo el respeto de sus decisiones, sino la necesidad de que se mantenga en el tiempo porque está consagrada en la Constitución”.



Carrillo aseguró que la única esperanza que tiene, a 70 días de entregar su cargo, es “que los nuevos vientos sigan favoreciendo la consolidación de la JEP como alta corte de justicia y paz, de esa justicia restaurativa, prospectiva y dialógica”, y envió un mensaje de bienvenida al nuevo presidente Cifuentes, de quien destacó su trayectoria profesional y su calidad como jurista y demócrata.

Agregó: "Alguien decía de una institución que si la JEP no existiera habría que inventarla, pero aquí no solo inventada, sino consagrada en la Constitución, algunos quieren destruirla, arrasando de paso con otro par de cortes. Gran paradoja, cuando en este momento lo que Colombia necesita es más justicia”.

“La reforma de la justicia no puede consistir en la demolición del Estado de derecho. Hoy se necesita más justicia y no menos, más jueces, más desconcentración, más descentralización, más acceso, más justicia local y más recursos”.