La alcaldesa mayor de Bogotá, Claudia López y el secretario de Seguridad, Hugo Acero, entregaron el balance de la campaña, Desarme por la Vida, gracias a la cual se incautaron más de 127.000 armas blancas y se impusieron la misma cantidad de comparendos por su porte ilegal. De igual manera fueron confiscadas 1.298 armas de fuego.

En promedio, cada 8 horas es decomisada un arma de fuego en la ciudad y 14 armas blancas son decomisadas cada hora. De esta manera, desde el lanzamiento de la campaña Desarme Por La Vida el promedio mensual de incautación de armas aumentó un 26%.

“Haber sacado de circulación durante 2020 más de 127.000 armas blancas, corto punzantes y más de 1.200 armas de fuego, se puede traducir en igual número de hurtos que logramos evitar y vidas que logramos salvar. Y esta es una campaña justamente para eso: para salvar vidas y seguir reduciendo las cifras de inseguridad en nuestra ciudad”, dijo ayer la alcaldesa López.

Las armas blancas decomisadas primero son compactadas y luego fundidas para terminar convertidas en metal reciclado con el que forjan productos simbólicos que promueven la cultura y la paz, pero lo más importante es que al sacarlas de circulación se salvaron muchas vidas. Este proceso de compactación, destrucción, y fundición es realizado por la compañía recicladora Robermar SAS.

Hay que recordar que el primer proceso de fundición se realizó en mayo del presente año y se destruyeron 107.000 armas blancas que habían sido incautadas en los últimos meses de 2019 y los primeros de 2020.

El segundo proceso se llevó a cabo el pasado 14 de diciembre, en ese momento se destruyeron cerca de 58.000 armas incautadas en los últimos meses. Estas acciones van ligadas a la campaña Desarme Por La Vida, con la que se busca reducir los homicidios, las lesiones personales, los hurtos a personas y al mismo tiempo, aumentar los niveles de convivencia y confianza entre los ciudadanos y las autoridades.

Esta estrategia contempla dos rutas de desarme. La primera consiste en la entrega voluntaria y para esto en cada Alcaldía Local hay una urna en donde la ciudadanía puede acercarse para depositar las armas blancas. La segunda ruta va de la mano con el aumento de las requisas por parte de la Policía en los barrios con mayor índice de homicidios, hurtos y lesiones personales.