Los datos de las Naciones Unidas muestran un incremento del 17% en el área sembrada entre 2016 y 2017
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Se dirá que 30 días es poco tiempo para que se perciban los cambios de rumbo, pero hay temas que no solo están sobrediagnosticados, sino que hacen parte del debate político desde hace mucho rato.
Por eso, ante las cifras que les dan la razón a quienes mantienen alertas encendidas hace muchos meses (¿años?), como por ejemplo el hoy presidente Iván Duque, sobre los peligros de que Colombia ‘nade en coca’, la opinión pública tendría derecho a reclamar que en un mes hayan tomado decisiones para que se avizore el tan anunciado cambio de rumbo.
Pero no. Ayer Duque informó que en los próximos días presentará al país su política de lucha antidroga que será “integral y contundente” para que esa “economía ilícita no siga haciéndole más daño a Colombia”.
Y la semana pasada, reunido con la bancada conservadora, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, hablando de volver a fumigar con glifosato, dijo que “llevamos cinco años con unos crecimientos vertiginosos en las áreas de cultivos y esa tendencia hay que echarla para atrás. No hay más camino. De lo contrario este país tendrá unas dificultades inmensas”.
¿No será, entonces, que nos está cogiendo la noche para reiniciar la fumigación con glifosato?
Coca a montón
Según el Informe de Monitoreo de Territorios Afectados por Cultivos Ilícitos 2017, preparado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) en el marco del Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos en Colombia (Simci), Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína del mundo al registrar aumentos históricos de las plantaciones de coca y de su capacidad para producir esa droga.
Los cultivos de hoja de coca crecieron 17% hasta 171.000 hectáreas, mientras que el potencial de producción de cocaína subió 31% respecto de 2016 a 1.379 toneladas, un récord desde que comenzaron estas mediciones en 2001, informó la Onudc.
Las cifras concuerdan con la tendencia señalada en junio por la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (Ondcp), del gobierno de Estados Unidos, según las cuales, “alcanzando un nivel sin precedentes”, el cultivo de coca en Colombia aumentó un 11% de 188.000 hectáreas en 2016 a 209.000 hectáreas en 2017, mientras que la producción de cocaína pura potencial colombiana también aumentó en un 19%, de 772 toneladas métricas en 2016 a 921 toneladas métricas en 2017.
Aunque los guarismos de la ONU y el gobierno norteamericano difieren, por “método y tecnología”, también en junio Juan Carlos Garzón y María Victoria Llorente, en su informe “¿Por qué siguen aumentando los cultivos de coca en Colombia?”, publicado por la Fundación Ideas para Paz (FIP), explicaron que “sus tendencias en la última década han sido consistentes”.
De hecho, aunque las cifras de narcocultivos aparecen mayores en el informe norteamericano, el incremento fue mayor en el de la ONU.
Para Garzón y Llorente si bien la cifra norteamericana es la “más alta de la cual se tiene conocimiento, desde una perspectiva histórica se puede afirmar que el cultivo de coca es un problema crónico, que ha tenido ciclos de aumentos y descensos en los últimos 20 años”.
Preocupación
"Quiero expresar mi profunda preocupación por la cantidad de dinero que mueven las drogas ilícitas", dijo el representante en Colombia de Onudc, Bo Mathiasen, en la presentación del informe anual.
Mathiasen afirmó que actualmente no solo hay más plantaciones, sino que estas producen un 33% más de hojas que en 2012 por la variedad de las plantas y su menor afectación de plagas.
"Una de las razones para el incremento es la percepción de menor riesgo frente a la actividad ilegal. Ante esta baja percepción en el riesgo, aumentó el área sembrada", afirmó.
La ONU estimó que la producción potencial de cocaína en Colombia tiene un precio en el mercado local de 2.700 millones de dólares, pese a que el kilo bajó 11% el año pasado, a 4,4 millones de pesos (unos 1.400 dólares).
"Si se contrasta este comportamiento con la oferta de cocaína, podría inferirse que los precios respondieron a un aumento en la disponibilidad", reza el documento.
Aunque la ONU resaltó el aumento en las incautaciones (435 toneladas, 20% más que en 2016) y que la erradicación forzosa casi se triplicó, llamó la atención porque "el ritmo es menor al incremento de la producción potencial".
Crecimiento de narcocultivos
Informe 2016 2017 Variación
Onudc 146.000 h 171.000 h 17%
Ondcp 188.000 h 209.000 h 11%
Fuentes: Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) y Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (Ondcp)
Crecimiento de la producción de cocaína
Informe 2016 2017 Variación
Onudc 1.053 tm 1.379 tm 31%
Ondcp 772 tm 921 tm 19%
Fuentes: Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) y Oficina de Política Nacional de Control de Drogas (Ondcp)