Con decenas de arreglos florales ubicados en más de 40 puntos críticos en materia de siniestralidad, la ciudad inició ayer los actos enmarcados en el Día Mundial en Memoria de las Víctimas de Siniestros Viales, el cual se conmemora el tercer domingo de noviembre de cada año.
Este es un día internacional proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con el objetivo de recordar a las víctimas de siniestros de tránsito, junto con sus familiares y amigos.
“Con este homenaje, Bogotá se une a las familias que han ubicado placas, flores y otros símbolos en algunos puntos de la ciudad para recordar a sus seres queridos, que lamentablemente han perdido la vida en siniestros viales. Quisimos esta vez cubrir la ciudad de flores para llamar la atención de los bogotanos sobre este problema de salud pública que anualmente cobra la vida de más de 500 personas en Bogotá y de aproximadamente 1,3 millones de personas en todo el mundo”, dijo ayer Juan Pablo Bocarejo, secretario distrital de Movilidad.
Con la etiqueta #FloresPorLaVida en redes sociales, los bogotanos se pueden sumar al homenaje organizado por la ciudad durante esta semana y participar de los varios eventos que la Secretaría tiene preparados.
El próximo sábado 16 de noviembre a las 5:00 p.m., se llevará a cabo el acto principal en conmemoración del Día Mundial en Memoria de las Víctimas de Siniestros Viales en la plazoleta de la estación Museo Nacional de Transmilenio.
Durante el evento, el Distrito, en compañía familiar y amiga de las víctimas, fundaciones, y la ciudadanía en general, le rendirá un homenaje a la memoria de las personas que han perdido la vida en eventos de tránsito con el objetivo de reivindicar la vida. En este punto, los bogotanos han podido apreciar desde el 1 de noviembre las esculturas de la exposición itinerante Grito en la calle, las cuales han sido construidas con partes de vehículos, motos y bicicletas involucrados en siniestros viales.
Problema de salud pública
En Bogotá, este problema de salud pública ha cobrado la vida de más de 11 mil personas en lo corrido del siglo XXI. Aunque en 2003 la cifra disminuyó casi a la mitad, al pasar de 1.014 en 2000 a 585, el número de víctimas fatales en la ciudad ha tenido una estacionalidad entre 500 y 600 muertos.
En 2018 en Bogotá 514 personas fallecieron en siniestros de tránsito. El 89% de las víctimas corresponden a usuarios vulnerables: 245 peatones (48%), 179 motociclistas (29%) y 64 ciclistas (12%). De acuerdo con los datos del Distrito, el año pasado en Bogotá en promedio murieron tres personas cada dos días por siniestros viales, ocho de cada 10 víctimas fueron hombres.
La interacción más crítica en 2018 fue entre motociclistas y peatones, con 80 fallecidos, la segunda fue entre vehículos livianos y peatones, con 60, y la tercera entre buses de transporte de pasajeros y peatones, con 50.
Visión Cero
En 2016, Bogotá adoptó la política internacional de seguridad vial Visión Cero como base del Plan Distrital de Seguridad Vial y del Motociclista 2016-2027, la hoja de ruta que guía los programas de la ciudad en esta materia con estrategias de fortalecimiento institucional, comunicación y educación, trabajo con víctimas, infraestructura segura y acciones de control.
La Visión Cero tiene como premisa que todas las muertes en el tránsito son evitables y aborda la seguridad vial con una mirada ética diferente, la cual reconoce que los seres humanos somos falibles y vulnerables. Esta política tiene como base cuatro principios: Las fatalidades y lesiones graves son prevenibles; el sistema de transporte debe ser seguro; cometer errores es de humanos, y por último, a mayor velocidad, mayor es la gravedad del siniestro.
Gracias a las múltiples acciones adelantadas por esta administración, se han salvado 71 vidas en los últimos tres años, pasando de 585 fatalidades en 2016 a 514 en 2018, lo que representa una reducción del 12% en el número de muertes anuales por siniestros viales.
Con el balance del 2018, Bogotá tuvo la tasa de muertes por siniestros de tránsito más baja entre las principales ciudades de Colombia con 6,3 muertes por 100 mil habitantes, esto es menos de la mitad de la tasa nacional de 13,8 muertes por 100 mil habitantes.