Al afirmar que la lucha contra los cultivos ilícitos se va a ganar de la mano de quienes decidieron abandonar la ilegalidad, el consejero presidencial para la Estabilización y la Consolidación, Emilio Archila, destacó que en San José del Guaviare (Guaviare) 1.860 familias empezaron a recibir los insumos de la asistencia alimentaria, etapa clave del Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos Ilícitos (PNIS) y de la política de Paz con Legalidad.
“Desde el punto de vista de la sustitución de cultivos ilícitos tenemos no solamente el compromiso del presidente Iván Duque de apoyar a casi 100.000 familias, que están en el PNIS, sino que tenemos otras dos estrategias: formalizar para sustituir y pago por servicios ambientales. En este tema, nunca nos vamos a dar por vencidos y vamos a vencer a los malos”, resaltó el Consejero.
En tal sentido, indicó que, en la estrategia de Formalizar para Sustituir, el Gobierno recibe apoyo de la Fundación Buffett y Usaid.
“Cuando llegamos al Gobierno recibimos un plan de sustitución de cultivos ilícitos desfinanciado, sin recursos, en desorden. Con una inversión de casi $1 billón, les estamos cumpliendo a 99.079 familias que arrancaron los cultivos de hoja de coca en un compromiso serio, cuyos resultados están a la vista”, resaltó Archila.
En ese contexto, subrayó el hecho que 1.860 familias de 91 veredas de San José del Guaviare, comenzaron a recibir insumos para asistencia alimentaria en un cronograma que va hasta el 31 de marzo, con una inversión de $3.348 millones.
Las 1.860 familias de San José del Guaviare están recibiendo 1.270 cerdos, 68.713 aves, 56.014 peces (alevinos), 14.361 bultos de concentrados, 2.399 bultos de cemento, 18.406 tejas, 8.865 plántulas de frutales, 1.213 paquetes de semillas, 231 carretillas, 1.107 rollos de alambre, 271 tanques y 1.117 metros de manguera.
Cabe señalar que, según el PNIS, la asistencia alimentaria inmediata, la asistencia técnica integral y la seguridad alimentaria son tres componentes que hacen parte del apoyo que reciben las familias, mientras desarrollan el proyecto productivo de largo plazo para sustituir la hoja de coca.