En una atmósfera palpablemente álgida, ayer en horas de la tarde el Ministerio de Salud avaló todas las medidas tomadas por el Distrito Capital para la ciudad de Bogotá el domingo en horas de la noche.  Al respecto el ministro Fernando Ruiz, entre líneas, dejó ver su desacuerdo y calificó textualmente de “unilateral”, la resolución tomada por el Distrito.

“Se analizó el tema del aislamiento preventivo obligatorio de las tres localidades. El Ministerio de Salud expresó algunas reservas sobre la eficacia de la medida. Sin embargo, se consideró que no hay información suficiente para poder tomar una decisión respecto a la medida, ya tomada unilateralmente el día de ayer, y por lo tanto se evaluará en un próximo comité asesor el próximo martes a las dos de la tarde”, precisó el ministro Ruiz.

Adicionalmente, el funcionario fue claro al advertir que, cuando la ocupación de unidades de cuidados intensivos en la ciudad llegue a una demanda del 85% de camas UCI, “programará una reunión de emergencia para tomar decisiones con respecto a este tema. El Ministerio de Salud, bajo instrucción del señor Presidente de la República, ha venido acompañando Bogotá, como todas las ciudades desde el principio en todo lo que tiene que ver con el manejo de la pandemia; hemos realizado reuniones con la ciudad y con la alcaldía y siempre hemos buscado generar las mejores condiciones para poder mantener a la ciudad libre de contagio”.

No obstante, el ministro sí le hizo un llamado de atención al Distrito, por la falta de medidas tomadas a nivel local en el mes de diciembre.

“La ciudad tomó medidas a partir del pasado 21 de diciembre pero no las tomó ni el 24 ni el 31 del mes y estos efectos que se están observando, que también se han visto en otras ciudades, alientan una amplia revisión de la situación epidemiológica de la ciudad. Nos preocupa una tasa de positividad alta entre el 30% y el 40% según estimaciones", continuó el jefe de la cartera de salud.

Medidas adicionales

Por su parte, el alcalde encargado, Luis Ernesto Gómez, indicó que las únicas dos nuevas medidas que tendrá Bogotá serán la prohibición en la venta de trago durante el puente de Reyes, por solicitud de los ministerios de Salud e Interior.

“Fue una reunión muy productiva y muy amable. Recibimos las preocupaciones de señor ministro del Salud y del Interior, quienes nos pidieron que evaluáramos medidas adicionales que tuvieran un efecto general sobre el conjunto general de la ciudad, aparte de las medidas focalizadas. La recomendación que nos hicieron en ese caso, es que en este puente de Reyes, establezcamos a partir de las 6 de la tarde del viernes y hasta las cinco de la mañana del martes, una restricción al expendió de bebidas embriagantes y su consumo en establecimientos de comercio”, indicó este lunes el alcalde (e), Luis Ernesto Gómez.

Adicionalmente la medida de pico y cédula para el ingreso a establecimientos públicos y de comercio se mantendrá durante lo que resta del mes.

¿Se equivocó el modelo?

Ahora bien, ¿podría decirse que los modelos epidemiológicos para Bogotá se equivocaron? No precisamente. De acuerdo con el director del Departamento de Ingeniería Biomédica de la Universidad de los Andes, Juan Manuel Cordovez, hay una sensibilidad de los modelos a los datos y especialmente a los datos recientes.

“Te pongo la siguiente analogía: frente a la magnitud del huracán que arrasó en San Andrés y Providencia, todos los modelos fracasaron en predecir que pasaría de categoría dos a categoría cinco en el transcurso de 12 horas".

Entonces, ¿qué salió mal? De acuerdo con el profesor los datos apuntaban a una meseta o a un pequeño pico la última vez que se reunió el equipo que asesora a la alcaldesa a principios de diciembre, pero la dinámica fue distinta en la medida en que la gente se reunió más de lo que se proyectó.

“En estos modelos hay unas cosas que se llaman la matrices de contacto, que determinan precisamente eso, y los modelos son muy sensibles a esas matrices. Sin duda Bogotá estuvo un poquito más desordenada de lo que pensamos que estaría y por eso se configuró este pico. Además es muy probable que por ahí el 13 de enero se vaya a estar viendo una ocupación de las UCIs cercana al 100% para Bogotá”, dijo a EL NUEVO SIGLO el profesor Cordovez.

El catedrático, quien añadió que originalmente los modelos predecían no tanto un pico sino una pequeña tendencia al alza pero más como una meseta en un nivel ligeramente más elevado, indicó que la próxima alza en los contagios será de una magnitud parecida a la anterior.

“No vamos a superar las UCIs pero esta restricción es para asegurarse de que eso no suceda. La evidencia de las cuarentenas por localidades en julio y agosto dejó el aprendizaje de que son efectivas. Quitarle un poquito de leña al fuego y eso siempre sirve”, finalizó Cordovez.

Por su parte, el epidemiólogo de la Universidad de los Andes, Luis Jorge Hernández, cuestionó la medida y, reiterando que las cuarentenas masivas son un fracaso de la salud pública, lo que ahora debería instaurase, a su juicio, son los cordones sanitarios específicos localizados. 

"La información que mostró el alcalde (e) de Bogotá no es suficiente desde el punto de vista epidemiológico para tomar la decisión de cerrar tres localidades. Si hay más información debe mostrase a la ciudadanía y Academia. Por ejemplo: ¿Cuál es la tasa de casos activos por UPZ?, ¿Cuál es el coeficiente de transmisibilidad por UPZ?, ¿Cómo están los indicadores de pruebas, rastreo y aislamiento en Bogotá?", se preguntó el epidemiólogo en conversación con este Medio.

Adicionalmente, Hernández agregó que el problema de las cuarentenas radica en que nadie consulta a los ciudadanos de las localidades, quienes se convierten en objetos pasivos y no en sujetos de derechos. 

Tras el aval del Gobierno nacional, hoy las localidades de Usaquén, Suba y Engativá entrarán en cuarentena estricta. Los viajeros que están ingresando a la ciudad deberán hacer un aislamiento voluntario de 7 días que permita monitorear la aparición de síntomas, y se mantendrán las medidas hospitalarias tomadas en días anteriores por la Secretaría de Salud.

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"Cuando la ocupación de UCIs llegue al 85%, se programará una reunión de emergencia para tomar nuevas decisiones"