Fabio Ochoa Vasco, alias 'Carlos Mario' o 'Kiko Pobre', uno de los lugartenientes del capo de la droga Pablo Escobar ha terminado de cumplir condena en Estados Unidos trece años después de su encarcelamiento.
Según la Oficina de Prisiones de Estados Unidos, quedó en libertad el 6 de junio pasado y fuentes de la mafia aseguran que ya está en las calles, según recoge el diario 'El Tiempo'. Sin embargo, fuentes federales estadounidenses apuntan a que su libertad efectiva puede retrasarse por la pandemia, tal como está pasando con Salvatore Mancuso.
En 2007 se entregó en Estados Unidos y ofreció información sobre los nexos de la mafia con paramilitares, empresarios y políticos. En septiembre de 2009 se declaró culpable de cargos de narcotráfico y blanqueo de capitales.
Cerca de 50 empresas y 64 personas --entre ellas importantes empresarios colombianos-- ingresaron a la llamada 'Lista Clinton' acusados de pertenecer a la extensa red criminal de Ochoa Vasco, que se extendía por Colombia, Belice, Ecuador, Guatemala, Honduras, Jamaica, México y Panamá.
Ochoa Vasco aseguró en su momento que, a través de 'Berna' y de otros miembros del grupo Perseguidos por Pablo Escobar (Pepes), se empezó a acercar a varios jefes de los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y, años más tarde, conoció a Salvatore Mancuso.
El excapo colombiano tiene esposa e hijos estadounidenses, por lo que las autoridades colombianas esperan que no sea deportado. En Colombia tiene pendientes varias investigaciones, pero si permanece en Miami no saldrán adelante.