Es muy importante que la Justicia Especial para la Paz (JEP) garantice a todos los colombianos que habrá verdad, justicia, reparación y no repetición, de manera pronta, frente a quienes han cometido los crímenes más deplorables de nuestra historia.

Así lo demandó hoy el Presidente Iván Duque al intervenir en la ‘Cumbre de la Justicia’ y la ceremonia de entrega del VII Premio Excelencia a la Justicia, evento realizado en la sede de Chapinero de la Cámara de Comercio de Bogotá.

En su llamado a la JEP, el Mandatario explicó que la verdad debe ser efectiva y pronta, mientras que la justicia significa que los victimarios recibirán condenas proporcionales e instrumentales para que las víctimas tengan una reparación moral.

“Reparación quiere decir que los victimarios contribuyan efectivamente a reparar a esas personas a las cuales ellos les han infligido tanto dolor”, indicó.

En este sentido, el Mandatario consideró que es necesario que la Fiscalía General de la Nación proceda de inmediato con la extinción de dominio de todos los bienes que los victimarios no hayan declarado.

Agregó que se requiere que “esa extinción de dominio conlleve a que también se contribuya a la reparación de las víctimas en nuestro país”.

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Al referirse a los fundamentos de la política de paz con legalidad, el Mandatario reiteró que su Gobierno apoya el proceso de reincorporación de todos los desmovilizados que genuinamente están en el proceso de apostarle a la reconciliación, pero, al mismo tiempo –advirtió–, “se debe ser implacable, se debe obrar con celeridad” contra “los que han pretendido y pretenden seguir en la criminalidad”.

De igual manera, el Jefe de Estado expuso que es muy importante que las personas que están siendo investigadas por la justicia transicional por graves crímenes de lesa humanidad, “no pretendan dirigirse a la justicia solamente por correo y a través de apoderados, sino que le muestren al pueblo colombiano que se están presentando personalmente cuando se les hacen los llamados”.

Para el Presidente Duque, si la Justicia Especial para la Paz hace exigibles los principios de verdad, justicia, reparación y no repetición, “las víctimas tendrán esperanza de que habrá una reparación moral”.
 
Por último, señaló que para las víctimas, reparación moral no es otra cosa que ver a sus verdugos, a sus victimarios, “tener que responder con efectividad y no pretender eludir la más clara de sus responsabilidades, que empieza por el acto de contrición, de pedir perdón y de aceptar que no existe en nuestro país ninguna causa que justifique un homicidio, un secuestro o un acto de terror”.