La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), garantizó el pago de los subsidios de arriendo para los damnificados en Mocoa, Putumayo y Rosas, Cauca.
En el caso de Mocoa, la entidad entregará $1.077 millones a 774 familias que fueron afectadas por la avenida torrencial ocurrida durante la noche del 31 de marzo y la madrugada del 1 de abril de 2017. Este monto corresponde al periodo de febrero a mayo.
Durante esa noche, las fuertes lluvias provocaron el desbordamiento de los ríos Mocoa, Mulato y Sangoyaco, así como las quebradas La Taruca y La Taruquita, generando deslaves y flujos de lodo que ocasionaron una gran avenida torrencial. Este desastre afectó varios sectores de la cabecera municipal, destruyó viviendas, puentes y arrastró vehículos a su paso.
De otro lado, la Unidad entregará $38.976.000 a 28 familias damnificadas por la avenida torrencial ocurrida en el año 2018 en Mocoa. Este pago corresponde al periodo de febrero a mayo de 2024.
Los subsidios para damnificados de Rosas, Cauca
La UNGRD también destinó recursos para apoyar a las familias afectadas en el municipio de Rosas por emergencias registradas en los años 2019, 2023 y 2024.
La entidad giró subsidios de arriendo por más de 290 millones a 209 familias afectadas por remociones en masa y avenidas torrenciales. Para los eventos 2019 y 2023 los pagos corresponden de marzo a mayo y para el evento 2024, el pago corresponde de abril a julio.
Damnificados engañados
La construcción de viviendas para los damnificados de la avalancha en Mocoa ha estado marcada por una serie de controversias y graves irregularidades. A pesar de que el Gobierno Nacional prometió la edificación de 909 casas en el proyecto conocido como Sauces II, hasta la fecha, solo unas pocas han sido completadas, y muchas de las familias afectadas aún esperan su vivienda digna.
En su momento, el exdirector de la entidad, Olmedo López, denunció que las víctimas fueron engañadas al prometerles viviendas en terrenos que, debido a su ubicación sobre cuerpos de agua, eran inapropiados y peligrosos para la construcción.
Según López, "le mintieron al país porque nos vendieron a Colombia y a los damnificados, la idea de que podíamos construir un proyecto de vivienda sin licencia de construcción". Además, se han señalado sobrecostos en las obras que superan los 197.000 millones de pesos, un incremento significativo respecto al presupuesto inicial.
Los subsidios de arriendo se han implementado para ofrecer a las familias una solución inmediata, permitiéndoles acceder a viviendas temporales.