Un panorama preocupante de violencia en el país reveló el alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, Alberto Brunori.
Según el organismo mundial, el año pasado en Colombia se registraron 36 masacres, la cifra más alta desde 2014.
En medio de estas masacres fueron asesinadas 133 personas en los departamentos más afectados, que fueron Antioquia, Cauca y Norte de Santander.
En cuanto a violencia, la ONU destacó que “la tasa nacional de homicidios en 2019 fue de 25 por cada 100.000 habitantes, lo que indica la existencia de un nivel de violencia endémica”.
Asimismo, el organismo mundial también expresó preocupación por la situación de los defensores de derechos humanos. Durante 2019 ese organismo registró 108 homicidios, de los cuales el 86% se dieron en municipios con un índice de pobreza multidimensional superior a la media nacional y el 55% de los casos ocurrieron en Antioquia, Arauca, Cauca y Caquetá.
Los principales responsables de estos hechos, según las 1151 misiones al terreno realizadas por la ONU, serían grupos criminales como Clan del Golfo, ELN y los Caparrapos.
Por último, la ONU hizo un llamado para que, "la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad sea convocada regularmente, a fin de cumplir con sus objetivos establecidos en el Acuerdo de Paz, en particular con lo relacionado al desmantelamiento de grupos criminales sucesores de organizaciones paramilitares, y que son a menudo responsables de los asesinatos”.