Una invitación a “respetar la reserva legal de las investigaciones, en este caso las diligencias que cursan en la Procuraduría General de la Nación” realizó el Comando del Ejército Nacional por medio de un comunicado de prensa, tras la publicación de un artículo de la revista Semana, titulado “El general en su laberinto: Los secretos de la cacería que involucra al comandante del Ejército”.
“Resaltamos la importante labor informativa que desarrollan los medios de comunicación en beneficio de la comunidad en general. No obstante, hacemos a los mismos y a las autoridades competentes una invitación a respetar la reserva legal de las investigaciones en este caso de las diligencias que cursan en la Procuraduría General de la Nación. Ello en pro de los principios fundamentales, como la presunción de inocencia, debido proceso, derecho a la defensa, honra y buen nombre del personal que sea parte de las mismas”, señaló el texto.
El Ejército manifestó que una vez se conocieron las denuncias a nivel interno se abrió una investigación y además se pidió el acompañamiento de la Fiscalía y la Procuraduría. “A partir de las publicaciones emitidas por el semanario y replicadas por otros medios de comunicación se efectuaron de manera inmediata las acciones administrativas pertinentes, con el propósito de esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar, así como los responsables de las presuntas irregularidades mencionadas, todo ello en atención al cumplimiento de las políticas institucionales que deben acatarse por todos los hombres y mujeres que conforman la Fuerza, enmarcadas en la ética, transparencia y legalidad en el ejercicio de sus funciones”, sostuvo.
Y agregó: “Es así como desde el Comando del Ejército Nacional se ordenaron las actuaciones pertinentes, tales como visitas por parte de la Inspección General y la apertura de investigaciones disciplinarias. En igual sentido, se ha informado a la Fiscalía General y la Procuraduría General de la Nación cada uno de los hechos, para que estas entidades, en el marco de sus competencias constitucionales y legales adelanten las actuaciones a que haya lugar”.
Finalmente, el Ejército reiteró su “voluntad de apoyo y colaboración armónica con las entidades y dependencias en las cuales se encuentran actualmente las respectivas investigaciones, como la Fiscalía y la Procuraduría General de la Nación, en aras de obtener de manera pronta el esclarecimiento de los hechos, así como también respetará y acatará las decisiones adoptadas por la justicia. Las cuales tenemos certeza que serán el resultado de una objetiva valoración de las pruebas allegadas a los procesos”.
En el artículo “El general en su laberinto: Los secretos de la cacería que involucra al comandante del Ejército”, el semanario expone los cargos que enfrenta el excomandante de contrainteligencia, general Eduardo Quirós.
"Esos documentos forman solo una parte de los hallazgos de la Procuraduría General. Hacen parte del arsenal de evidencias con que el Ministerio Público formuló pliego de cargos al general Eduardo Quirós, hasta hace pocas semanas a cargo del Comando de Apoyo de Combate de Contrainteligencia Militar (Cacim), así como contra el segundo de esa unidad, el teniente coronel William Roberto Medina. Los oficiales tendrán que enfrentar un proceso señalados de cometer “faltas gravísimas”, que implican una sanción de más de diez años", indicó.
En el texto se señala que el general Nicacio Martínez, comandante del Ejército, estaría enterado de una supuesta "cacería" para encontrar a los militares que entregaron información a entes de control. "No es menos grave que esa investigación, como aparece en el pliego de cargos, deja en evidencia que el actual comandante del Ejército, general Nicacio Martínez, ordenó realizar esa “cacería”. Él ha negado insistentemente a la opinión pública que hayan desarrollado alguna actividad de contrainteligencia para cazar informantes y fuentes de los medios. Sin embargo, los testimonios y nuevas evidencias demuestran otra cosa", sostuvo el semanario.