En un nuevo episodio de violencia en la región, dos militares resultaron heridos en un enfrentamiento con disidentes de las FARC en Buenaventura. Este suceso ha puesto de manifiesto la persistencia de grupos armados ilegales en el Valle del Cauca y la necesidad de continuar con operativos para mantener el control y la seguridad en la zona.
El combate tuvo lugar entre tropas del Ejército, la Armada Nacional y miembros de las disidencias de las FARC, específicamente del Grupo Armado Organizado Residual "E6 Jaime Martínez". Según información proporcionada por la Fuerza Naval del Pacífico, el enfrentamiento se desató después de que los disidentes atacaran a las tropas con artefactos explosivos improvisados tipo "tatucos" que estaban ubicados en el río Naya.
Como resultado de estos choques armados, dos militares sufrieron heridas que requirieron atención médica urgente. Tras recibir los primeros auxilios en el lugar, fueron trasladados en helicóptero a un centro hospitalario en el Distrito Especial de Buenaventura, donde actualmente reciben atención médica especializada para su pronta recuperación.
Las Fuerzas Militares han condenado enérgicamente el uso de artefactos explosivos improvisados, considerados como prohibidos por el Derecho Internacional Humanitario. En este sentido, se han anunciado acciones jurídicas para denunciar este tipo de prácticas ante las autoridades pertinentes.
La situación en la región sigue siendo delicada, y las operaciones contra grupos armados ilegales continúan desarrollándose en diferentes áreas para garantizar la seguridad de la población. El Ejército Nacional ha informado sobre avances significativos en los operativos llevados a cabo en Popayán y el corregimiento de Robles, en Jamundí, Valle del Cauca, donde se busca capturar a los responsables de estas acciones violentas.
Además, se están coordinando esfuerzos con diversas instituciones para fortalecer las operaciones militares en la región y avanzar en la consolidación de la paz y la seguridad en Buenaventura y sus alrededores.