Al anunciar que llegará a su fin el programa ‘Ser Pilo Paga’, la ministra de Educación, María Victoria Angulo, aclaró que “el gobierno del presidente Iván Duque garantizará y honrará el compromiso con los 40.000 jóvenes” beneficiarios “para que culminen sus estudios” y precisó que “presentaremos un programa de acceso a la educación superior que vincula criterios de equidad, mérito y fortalece la universalidad pública”.
La jefa de la cartera sostuvo que "respeto y honro las necesidades de los 40.000 jóvenes, pero hay que mirar las cifras responsablemente", señalando que “buscaremos los recursos para honrar el compromiso que ya se hizo con los estudiantes que se acogieron al programa ‘Ser Pilo Paga’” y repitiendo que “los estudiantes becados por ‘Ser Pilo Paga’ podrán terminar su carrera. Eso está garantizado”.
"Para honrar los compromisos con los estudiantes que hicieron parte del programa ‘Ser Pilo Paga’ los años anteriores, debemos conseguir 2 billones de pesos con el señor ministro de Hacienda. Estamos en esa tarea", reveló Angulo, anotando que "Hacienda tiene clara esta prioridad. Son 2 billones de pesos los que se necesitan para honrar el compromiso con los Pilos. Por ahora, estamos enfocados en 2019 y que ahí estén tranquilos los estudiantes y sus familias".
Aunque reconoció bondades del programa, como buscar “que los estudiantes se encuentren como iguales, en lo privado y lo público”, la ministra Angulo insistió el tema financiero, puntualizando que “debemos tener como prioridad fortalecer la educación pública” y “diseñar un programa que dé respuesta durante los cuatro años”.
La alta funcionario reiteró que "es pertinente aclarar que por el momento estamos diseñando un nuevo programa, el cual será promovido” por el presidente Duque y en el que “se tendrán en cuenta no solo programas de mérito, sino que también le apuntaremos a la equidad y a fortalecer la educación pública. Ese será nuestro foco”.
Angulo precisó que "se hará un diseño sobre cómo será la distribución de cupos, en relación a la situación económica de los estudiantes. Las universidades públicas están dispuestas a sumarse a este proceso. Han tenido los últimos años un problema importante de recursos, entonces no es solo sobre los cupos, sino reconocer en costos los recursos que son necesarios para que la universidad se fortalezca y a futuro pueda responder a las regiones".
“El Presidente y el Ministerio debemos atender y entender la dinámica del sector de la educación superior en Colombia y proponer un programa que atienda varios temas: que acoja el mensaje o la filosofía en cuanto al mérito, a luchar y trabajar por la equidad y la dinámica de la universidad pública”, declaró.
Tras indicar que “debemos pensar cómo garantizar la educación superior a los estudiantes de cualquier parte de la región”, la Ministra expresó que “debemos plantear cuáles serán los recursos de los próximos cuatro años”, que “debemos pensar en las matrículas públicas” porque “cada vez que se invierte en la universidad pública estamos pensando en el mañana” y que “la universidad pública tenía necesidades que nunca se tuvieron en cuenta”.
Para Angulo, “no se puede entender un sistema con carencias, con inequidades, con presencia muy fuerte de la universidad pública en el territorio y con muchos jóvenes que quieran acceder. Es como hacer una lectura adecuada que si usted tiene un presupuesto público para la educación pública, ¿pues a qué lo destina?”.