Persisten las graves situaciones de hacinamiento y de salubridad que llevaron en su momento al Defensor del Pueblo Regional a instaurar una acción de tutela por la transgresión de los derechos fundamentales de los reclusos, estableció la Contraloría General tras una visita de tres días a las cárceles de Pasto e Ipiales en Nariño.
Los fallos de esta tutela, adoptados por la Sala Penal del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Pasto y la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, fueron revisados por la Corte Constitucional que, mediante Sentencia T-197 del 3 de abril de 2017, ordenó a las autoridades competentes adoptar medidas urgentes y apremiantes para resolver las situaciones de hacinamiento y demás presentadas en los cinco establecimientos de reclusión que operan en el departamento de Nariño.
De la visita a la Cárcel de Varones de Pasto-Epmsc, se evidenció que: los internos no cuentan con áreas de comedor para consumir alimentos, como sucede en el Patio 4 del establecimiento carcelario, ni con áreas para distribución de alimentos, lo que hace que las condiciones de higiene y presentación de los alimentos, vulneren parámetros mínimos de dignidad humana.
El sobrecupo en los patios del establecimiento se evidencia en lo encontrado en los pasillos, donde los internos que no cuentan con celda asignada, deben dejar sus pocas pertenencias en las vías de circulación, donde pernoctan en las horas de la noche.
El hacinamiento presente en el reclusorio para varones se replica en la Reclusión de Mujeres, que funciona como patio separado al interior del penal, donde en una celda para dos personas deben dormir cinco y las instalaciones son reducidas.
De la visita a la Cárcel de Varones de Ipiales-Empsc, se evidenció que: el inicio de las obras de intervención de la infraestructura hidráulica del establecimiento, agravó el hacinamiento ya existente en dicho penal, ya que es necesario mantener libre el área donde se realizarán los trabajos, y los internos deben ser redistribuidos en los restantes patios, lo que lleva a que muchos de ellos pernocten en los baños, sitios que por su estado actual requieren ser reparados.
Pese a que algunos patios cuentan con áreas para consumo de alimentos, en otros patios no existen, y las condiciones de distribución de los mismos se tornan indignas.
El área de sanidad no cuenta con cielo raso, lo que lleva a que las instalaciones se inunden cada vez que llueve.