El departamento de Cundinamarca es una despensa no solo para la ciudad de Bogotá sino para todo el país. A propósito, la Gobernación le agradeció a todos los hombres y mujeres que trabajan la tierra, pues es gracias a ellos que el departamento vende un promedio de $2,47 billones en productos del agro.
“Desde el municipio de Jerusalén, vereda Alto del Roble, queremos enviarles un saludo muy especial y desearles un muy feliz día a nuestros agricultores de Cundinamarca”, dijo al finalizar la semana la secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural, Viviana Andrea Pulido.
Ahora bien, con relación a este monto, socializado por la Secretaría de Agricultura, estos $2,47 billones en ventas de productos del agro son resultado de las negociaciones que se hacen con las principales ciudades del país, generando un promedio de $960.000 empleos directos. De la totalidad de dicha cifra, el 87,1%, es decir $2,15 billones, son comprados por Bogotá.
El cultivo de papa
Punto aparte, dentro de la radiografía que adelantó la Secretaría, quedó señalado que el cultivo de papa, con cerca de 44.000 hectáreas sembradas, con una producción cercana a las 950.000 toneladas y 60 municipios dedicados a ello, es el renglón de la economía rural que ocupa la mayor extensión en el departamento, en comparación con otros productos.
Adicionalmente, vale la pena mencionar que el área sembrada con este tubérculo representa el 37% del total del país, y que la papa genera alrededor de 100.000 empleos, lo cual lo convierte en un dinamizador de la economía local.
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Otros productos
En segundo lugar se encuentra la producción del cacao, gracias al cual el departamento de Cundinamarca ocupa el sexto lugar en el ámbito nacional. Y el tercer cultivo más importante en extensión del departamento es el del café, pues 69 de los 116 municipios lo producen en un área de 30.142 hectáreas y cerca de 28.600 familias dependen de la actividad cafetera en un total de 32.027 fincas.
A este respecto, la Secretaría sacó un estimativo: para el año 2020 se recolectaron y se vendieron, entre los meses de abril y agosto, unos 16 millones de kilos de café pergamino seco, para un total de 128.000 cargas.
“Me siento orgullosa de ser campesina, ya que habito un lugar libre de contaminación. Cultivo mis hortalizas y frutales orgánicos y muy sanos para el consumo de mi familia y para compartir con otras”, expresó Luz Mary Mora, habitante de la vereda Hatogrande del municipio de Suesca.
Por su parte, María Fernanda Saldana, habitante de Ubaté, manifestó que ser campesina significa tener sentido de pertenencia por la tierra y es sinónimo de mujer emprendedora, trabajadora y con aspiraciones de contribuir al departamento y al país.
“Es darle ánimo a otras mujeres para que también luchen por sus sueños e ideales. Ser campesina se siente en el corazón y en el alma, es un legado que siempre va a permanecer. La tierra nos da de comer y nos permite existir. Ser campesina es ser valiente”.
Finalmente, otros sectores agrícolas del departamento han avanzado durante las últimas semanas en su reactivación, como el sector panelero. La línea productiva de caña panelera es una de las más importantes en Cundinamarca, con un total de 38.962 hectáreas sembradas, y si bien la región del Gualivá es la principal productora agrícola, Caparrapí, Ubalá y Vergara son los tres municipios con la mayor cantidad de explotaciones de caña panelera en el departamento.
Por lo mismo, a finales del mes pasado la gobernación de Cundinamarca creó el Fondo de Estabilización de Precios de la Panela, una iniciativa que tiene el propósito de dotar a este sector con un instrumento financiero y comercial de participación en el mercado.