Ministro de Defensa indicó que la hipótesis más fuerte es que utilizarían estos artefactos para dañar una importante vía

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El extraño episodio que se registró el pasado jueves en un resguardo indígena en zona rural del municipio de Dagua, Valle, en donde una explosión cobró la vida de ocho personas y dejó cuatro más heridas, aún no ha podido ser explicado por las autoridades, en el sentido de saber cómo se produjo y por qué estaba ese material en este territorio donde la etnia ejerce jurisdicción.

El ministro de Defensa, Guillermo Botero, dijo que “presumiblemente era para generar un atentado. Esa es la hipótesis más probable”.

No obstante, el CRIC (Consejo Regional Indígena del Cauca) señaló que se trató de un atentado contra integrantes de la Guardia Indígena que se preparaban para participar en la Minga que desde hace cerca de dos semanas adelantan en ese territorio, exigiendo al Gobierno nacional cumplir acuerdos que han firmado con anteriores administraciones.

El Ministro de Defensa indicó que “una vez ocurrieron los hechos los mismos indígenas se encargaron, sin poder hacerlo, de alterar el lugar de los hechos, tapar el lugar de la explosión y mostrar como si no hubiera pasado, y eso hará más difícil el trabajo de Medicina Legal y otros entes de investigación”.

Aseguró Botero que “se alteró el teatro de los acontecimientos y eso es sumamente grave porque implica una conducta delictual”.

La explosión se produjo dentro de una vivienda de un miembro del cabildo indígena en la vereda Juntas, finca El Madroño, donde se encuentra asentada la Comunidad Tatabra del Cabildo Indígena Central Mayor.

“Creo que está claramente establecido lo que ocurrió: estaban en un resguardo indígena manipulando unos explosivos y en la manipulación, sin tener los debidos conocimientos, simplemente lo explotaron, y ya tenemos una cifra de muertos apreciable, más dos personas mutiladas, otras dos personas heridas y podría ser más el número de muertos”, añadió el Jefe de la cartera de Defensa.

El interrogante que hoy muchos se hacen es por qué de la existencia de explosivos en un resguardo indígena. Frente a lo cual el ministro Botero dijo: “Pues esa es la pregunta que ellos tendrán que absolver, aquí hay unos homicidios sumamente graves por los cuales tendrán que responder esas personas. Entonces seguramente en las indagatorias y demás surgirá qué fue lo que pasó. Y uno espera la colaboración de las familias muertas, que ellos cuenten la verdad qué era lo que estaban haciendo, qué era lo que pretendían hacer. Pero con seguridad está muy enfocada a la hipótesis principal a un daño a la vía Buenaventura-Buga, y más concretamente Buenaventura-Cisneros en el sector de La Delfina”.

Botero indicó que para que estos explosivos llegaran a manos de los indígenas en Dagua “tienen que tener unas organizaciones criminales detrás de ellos, sin lugar a dudas, porque cómo los consiguen. Esos explosivos fueron o bien entrados de contrabando al país o fueron adquiridos en un eventual mercado negro”.

Agregó que todavía no tienen identificado cuál organización criminal habría estado involucrada en estos hechos, “pero lo único que sí sabemos es que con manos delictivas se hicieron explosivos”.

El Ministro señaló que “se permitió a la Fuerza Pública, es un resguardo indígena, entrar por espacio de dos horas, se recolectó alguna información de tipo judicial que consideramos importante para tratar de establecer qué fue verdaderamente lo que ocurrió, pero es definitivamente una mala manipulación de unos explosivos, que está entre pentolita y pólvora negra”.

Dijo también Botero que “hay respeto por la jurisdicción indígena y esperamos que ellos entreguen la información pertinente, que se permita la investigación, que entren los forenses a establecer verdaderamente cómo ocurrió esta tragedia”.

En tanto que el Ministerio de Defensa indicó ayer en un comunicado que “tan pronto se tuvo conocimiento, se dispuso un equipo interinstitucional conformado por el Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) de Buenaventura y la Seccional de investigación criminal (Sijin) en compañía del personero municipal, para desplazarse al lugar de los hechos y verificar la situación”.

Agregó que “inicialmente no se permitió el ingreso de la comisión. Sin embargo, sobre las 6 de la tarde, el grupo de explosivistas de la Sijin ingresó a la finca El Madroño. Los cabildantes no permitieron realizar la exploración técnica por lo que no fue posible recolectar pruebas y los investigadores tuvieron que abandonar el resguardo indígena. Como hipótesis inicial, se maneja una eventual manipulación no adecuada de explosivos, aparentemente pólvora negra”.

Versión del CRIC

El CRIC señaló el pasado jueves en un comunicado que “teniendo en cuenta que el sitio de La Delfina era pequeño para atender a más de cinco mil indígenas que iban a llegar, las autoridades decidieron buscar otro espacio en el corregimiento de Juntas, resguardo indígena de Papitas municipio de Dagua”.

Añadió que en este lugar se realizó el trabajo logístico, una vez terminada las labores de adecuación del sitio, la “guardia se encontraba descansando dentro de una casa cuando minutos después ocurrió una explosión aproximadamente a las 3 de la tarde”. Según el consejero de Derechos Humanos de la Orivac (Organización Regional Indígena del Valle del Cauca), citado por el CRIC, “presuntamente una persona lanzó un artefacto explosivo, causando la muerte de ocho guardias indígenas y dejando gravemente heridos a tres de los guardias pertenecientes al pueblo Waunan, Nasa y Embera”.

Los pueblos indígenas del Cauca agrupados en el CRIC llamaron al Gobierno a “que atienda e investigue estos lamentables hechos acaecidos en medio de la movilización y acate los estándares en el marco internacional de los derechos humanos, para garantizar el ejercicio del derecho fundamental a la protesta pacífica contenido en nuestra Constitución Política y en tratados e instrumentos internacionales de derechos humanos y que protegen los derechos de los pueblos indígenas”.

Por su parte la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) indicó ayer que “rechazamos los señalamientos y estigmatización, por parte del Gobierno Nacional, en cabeza del Ministro de Defensa, que de manera irresponsable e infundada ha declarado sobre las circunstancias en que los comuneros y guardias indígenas fallecieron. Los pueblos indígenas somos pueblos de paz, no terroristas”.

Minga

En tanto que ayer en el municipio de Santander de Quilichao se dio inicio a la mesa de diálogo entre el Gobierno y los indígenas para buscar salidas a la Minga que desde hace 14 días se desarrolla en el Cauca con constantes taponamientos a la vía Panamericana.

La ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, indicó que el “Gobierno dialogará con responsabilidad y buscará que todos los recursos destinados a la población indígena del Cauca sean invertidos para atender sus necesidades”.

La cartera del Interior dijo que para el desarrollo de estos diálogos “el compromiso de la comunidad indígena es no montar nuevos bloqueos sobre la vía Panamericana e ir levantando los actuales paulatinamente”.

Dentro de la mesa de diálogo se instalarán tres comisiones: derechos humanos, y las comisiones técnica y política con el fin de avanzar en las rutas y los acuerdos para la construcción de confianza entre las partes.